Florentino Pérez piensa en un fichaje bomba para la delantera

Gerard Moreno viene siendo uno de los protagonistas en los últimos meses. Para empezar, por su brillante temporada, anotando la friolera de 30 goles entre todas las competiciones, y siendo el máximo goleador español en La Liga Santander, llevándose el ‘Premio Zarra’. Y eso también le valió para ganar la Europa League con el Villarreal de Unai Emery, siendo el primer título en la historia de ‘El Submarino Amarillo’, donde ya es un ídolo y un mito.

Obviamente, fue incluido en la convocatoria de la selección española para la Eurocopa, pero sorprendió a todos ver como comenzaba siendo suplente. Por suerte, Luis Enrique rectificó en el segundo encuentro, y ya fue titular, regalando el gol a Álvaro Morata, el único que han marcado hasta la fecha. Y tuvo la oportunidad de meter otro, pero su lanzamiento de penalti se estrelló contra la madera. A pesar de eso, no hay duda de que es la referencia ofensiva.

Y sigue sin entenderse el porqué le sustituyeron tan relativamente pronto. Sea como sea, a sus 29 años, el ex del Real Club Deportivo Espanyol y Real Club Deportivo Mallorca vive el mejor momento de su carrera. Nadie lo discute, y todos coinciden en señalar que es uno de los mejores atacantes de Europa, con las cifras en mano. Y varios medios ya se han atrevido a asegurar que tiene decidido abandonar el Estadio de la Cerámica pronto.

Una noticia sorprendente, pues todos esperaban que siguiera allí, y disputara la fase de grupos de la Champions League. Sin embargo, una fuente cercana al catalán ha afirmado que ya lo tiene pactado con la directiva, que le abrirá las puertas. Y poco ha tardado Florentino Pérez en preguntar si eso es real, pues, en caso de que se ponga a tiro, no lo dudará y se lo llevará para el Real Madrid. El único problema puede ser su elevado precio, de unos 100 millones de euros.

Es lo que dicta su cláusula de rescisión, y para conseguir una rebaja, tendrían que negociar con los ‘groguets’. Está por verse como acabará el asunto.

Mejor no hacerse muchas ilusiones.