¡Florentino Pérez se avergüenza de ellos! Los once nombres ridículos

En el Real Madrid no quieren hablar de ellos

¡Florentino Pérez se avergüenza de ellos! Los once nombres ridículos

El Real Madrid también tiene un pasado oscuro, en el que no todos han sido fichajes de lujo, que han salido como se esperaba. Cierto es que la cantidad de fracasos que han tenido es considerablemente inferior al del eterno rival, el Barça. Pero eso no quiere decir que no haya ejemplos más que evidentes. Y se podría armar un once ideal que avergüenza hasta al mismísimo Florentino Pérez, que es decir. Porque los nombres que salen no son poca cosa.

En la portearía estaría un Albano Bizarri que llegó siendo una de las grandes promesas del futbol argentino, y que parecía estar llamado a ser top mundial. Le ficharon desde Racing de Avellaneda, pero tuvo la mala suerte de coincidir con la explosión de un tal Iker Casillas. Aún y así, hizo carrera en el Real Valladolid, la Lazio, el Udinese Calcio o el Gimnástic de Tarragona. Diferente fue el caso de Diogo, que también vino desde Argentina, en su caso, de River Plate.

Nunca dejó muestras de estar a la altura de sus compañeros, y es más recordado por su pelea con Luís Fabiano, ya con la elástica del Real Zaragoza, que por sus cualidades. En el eje de la zaga, un futbolista del que aún no se olvida la afición, como Jonathan Woodgate. Él sí que fue un fiasco y no Gareth Bale, pues no dejó de lesionarse, y en su debut, se marcó un gol en propia y se marchó expulsado. 18 millones de euros pagaron. A su lado, estaría Predrag Spasic, que solo estuvo un año, antes de irse a Osasuna.

Woodgte

En el lateral zurdo, estaría el nombre más polémico, Fabio Coentrao, pues no lo hizo mal, y, de hecho, fue titular en la final de la décima Champions League. Su problema fue que le pillaran fumando, lo que no gustó, y su poca profesionalidad, que provocaron que durara poco, y se marchara por la puerta de atrás. Pasando al centro del campo, otro nombre que generará polémica es el de Thomas Gravesen, muy querido y recordado por su excéntrico estilo y su personalidad.

No obstante, la realidad es que técnicamente era muy limitado, y solo estuvo un año, antes de irse al Celtic de Glasgow. Menos incidencia tuvieron Julien Faubert y Pablo García. El primero aterrizó en el mes de enero, y ni se adaptó al vestuario, como explicó Sergio Ramos. De hecho, es que ni jugó, pues apenas estuvo unos meses, y su mejor aportación fue quedarse en el banquillo en un partido ante el Villarreal. El uruguayo, por su parte, llegó desde Osasuna, pero tampoco jugó nada.

Para finalizar la lista, tendríamos a Antonio Cassano, Royston Drenthe y Kaká. Los tres generaron una gran expectación, en especial, el último, que había sido el Balón de Oro y la estrella del AC Milan, y aterrizó junto a Cristiano Ronaldo, pero las lesiones le lastraron. El italiano, por su parte, dejó muy pocos detalles, y su gran lastre fueron sus problemas de peso, pues no se cuidaba como debía. El holandés, en cambio, le gustaba demasiado la vida nocturna, y muy poco los entrenamientos.

Vaya once…