Florentino Pérez se pone firme: ultimátum al crack de los 150 kilos

Si algo han comprobado algunos de los mejores jugadores de la historia reciente del fútbol es que el escudo del Real Madrid pesa, pesa mucho. Algo así deberá estar pensando ahora Eden Hazard, quien no ha logrado aún sacar su talento a relucir casi un año y medio después de aterrizar en Chamartín.

El futbolista belga está siendo uno de los quebraderos de cabeza de Florentino Pérez y Zinedine Zidane en las últimas temporadas y el presidente, ante la falta de recursos económicos con los que cuenta actualmente el club, no pondría reparos a darle salida si llega una oferta lo suficientemente llamativa por él. 

Pero… ¿quién va a querer a Hazard hoy en día por un precio descabellado? Si algo ha demostrado en este periodo que lleva vistiendo la elástica blanca es que el jugador está sumido en una profunda irregularidad, una irregularidad protagonizada por las continuas lesiones que sufre. A pesar de que su talento es descomunal y a pinceladas algo se ha dejado ver, el Real Madrid no se gastó más de 150 millones (y subiendo) por un futbolista que aparece diferencialmente en contados encuentros, Florentino quiere que sea la tónica de todo el curso.

Ahora, recién hemos comenzado el año 2021 y según afirman diversos medios internacionales, varios equipos le querrían tender la mano para sacarle del Real Madrid… pero a precio de risa, algo que por lo que no está dispuesto a venderle Florentino Pérez. El mandamás blanco, en cambio, si llega una oferta que se acercase a los 80 millones, valoraría seriamente su venta ya que Kyian Mbappé no se va a pagar con la mirada, el club necesitará tener ingresos para satisfacer las exigencias del PSG.

Así pues, enero ha comenzado de una forma bastante caldeada por las sensaciones en el juego y por la situación de algunos jugadores en el seno madridista, y cada vez son menos las esperanzas que alberga el presidente en resucitar a una estrella mundial que cada vez dista más de satisfacer las expectativas depositadas tras su fichaje en el verano de 2019, convirtiéndose en la inversión más cara de la historia del Real Madrid: estrella estrellada.