Florentino se obsesiona con él y quiere cerrarlo para este año

Su partido contra el Atalanta le acerca a los altares

Florentino se obsesiona con él y quiere cerrarlo para este año

Florentino Pérez ha quedado prendado del partido que ayer realizó Neymar Júnior contra el Atalanta de Bérgamo. El brasileño se echó a su equipo a la espalda y cargó con todo el peso de un encuentro que se le complico más de lo debido al PSG. Pese a que Neymar no marcó su partido fue soberbio. Apareció en todas las jugadas de peligro de su equipo y a pesar de que recibió más de 10 faltas, muchas de ellas rozando la expulsión, no se desconectó en ningún momento del encuentro. Por este motivo el presidente del Real Madrid lo tiene claro y una vez más irá a por su fichaje sea como sea. Neymar no es un niño malcriado inflado por el marketing, es un jugador con todas las letras y está en una edad perfecta para liderar un proyecto ganador. Florentino quiere que ese proyecto sea el del Real Madrid y está dispuesto a pagar por el ex del Barça todo lo que consiga este verano en traspasos.

Y es que el tema económico, su fichaje incluido su salario se elevaría hasta los 500 millones de euros, es lo que está haciendo que el brasileño siga atrapado en una liga que no le exige lo que puede dar y sobre todo que le aleja del foco mediático. La elección del brasileño de dejar el Barça por el PSG atendió más a motivos económicos que deportivos y tres años después la estrella de Brasil arrastra esa decisión.

Esta temporada con el equipo francés en semifinales puede hacer que todo el sufrimiento que ha pasado Neymar en París cobre sentidoSer campeón de la Champions lo cambiaría todo y el mundo miraría con otros ojos al ex jugador del Barcelona. Florentino, de manera inteligente, desea que el PSG no consiga ganar, pues puede que eso encarezca más a Neymar y complique aún más su posible fichaje.

A la tercera va la vencida 

El fichaje del brasileño por el Real Madrid es una obsesión que persigue a Florentino desde hace más de 8 años. La primera batalla la ganó el Barça. En la segunda, de forma inesperada y tras pagar 222 millones la ganó el PSG. En esta tercera el máximo mandatario del Madrid no quiere que haya rival posible. Su objetivo es claro: vestir a Neymar Júnior de blanco, nada más y nada menos.