Florentino ultima su plan: tras Alaba, otro recambio de Sergio Ramos
El presidente tiene 2 opciones para reforzar la defensa blanca
El Real Madrid ha experimentado más problemas defensivos de los esperados tras la incorporación de David Alaba hace unos meses y, a pesar de que el rendimiento está siendo gratificante para los intereses de los blancos, Florentino quiere apuntalar el eje central de la zaga con uno de los jugadores que lleva sondeando los últimos tiempos con vistas a cerrar su incorporación el próximo verano: Pau Torres o Antonio Rüdiger son los elegidos para tomar el testigo de un Sergio Ramos cuya marcha parece estar haciendo más daño de lo esperado.
Los problemas evidenciados esta campaña por el Real Madrid en la parcela defensiva (ha encajado 10 goles en 9 encuentros oficiales disputados) podría ser una traba en el tramo decisivo del curso y por ello Florentino Pérez no ha descartado aún utilizar el mercado invernal para cerrar la incorporación de Rüdiger, quien finaliza contrato con el Chelsea en junio de 2022.
El jugador berlinés lleva dos campañas rindiendo a un nivel excelso y, ya asentado como uno de los mejores defensas del continente, está recibiendo una lluvia de ofertas para tratar de sacarle de Stamford Bridge cuanto antes, siendo el Real Madrid, el Bayern Múnich y el PSG los tres equipos más interesados en el zaguero de 28 años. A pesar de que Abramóvich ha tratado de sellar la renovación del jugador, el alemán no parece estar por la labor de seguir vinculado al conjunto londinense y de ahí que Florentino cada vez esté mostrando más interés en su fichaje: llegaría gratis al finalizar la temporada.
Por otro lado, Pau Torres también está inscrito en la lista de alternativas para reforzar la zaga blanca y ser un relevo generacional de Sergio Ramos, más aún siendo español. El actual futbolista del Villarreal lleva varias campañas rindiendo a un nivel espléndido con el Submarino Amarillo y son muchos los clubes que le han tirado la caña en estos meses (Tottenham Hotspur, Manchester United y Chelsea), pero la alta cifra exigida por el conjunto castellonense ha sido una traba para certificar su marcha, los 65 millones estipulados en su cláusula de rescisión: este condicionante podría ser determinante para que sea finalmente Rüdiger y no él el elegido por Florentino y Ancelotti.