Florentino y Zidane le ponen fecha de caducidad y precio, a la calle

Desde que fuera Golden Boy hasta el presente, la proyección de Isco Alarcón ha sido una de las grandes pérdidas del mundo del fútbol. Pocos jugadores aúnan tanta calidad en sus pies y tan poca alma por el trabajo físico, y en el fútbol moderno con lo primero no vale para mucho. A Isco Alarcón le ha ido bien el papel de segunda espada, a la sombra de grandes nombres. Le bastó con estar y ser correcto, pero ahora no hay figuras en el Madrid y el trabajo no le va bien. Por eso Florentino Pérez y Zinedine Zidane quieren quitárselo de encima a la plantilla del Madrid en enero.

Y posiblemente para, como decimos, desgracia del fútbol, el Santiago Bernabéu no le echará de menos. Es más, según se pulsa el sentir de las redes sociales la salida del malagueño es una de las peticiones más repetidas de los hinchas blancos. A falta del juicio del coliseo blanco, que no ha sido en más de una ocasión precisamente magnánimo con Isco, buenas son las opiniones vertidas en unas plataformas que dan a entender que el señalamiento del ex del Málaga es mayoritario.

Está estigmatizado por la afición y viciado en el Madrid, y lo mejor para ambos, club y jugador, es que salga. A esta determinación han llegado Florentino Pérez y Zinedine Zidane con respecto incluso al mercado invernal, donde ven poco probable colocarlo en la Premier League o la Serie A, las dos ligas que en su día preguntaron por él. Pero van a intentarlo. Ya no se piden 50 millones de euros por él, sino que se aceptarán entre 20 y 30 kilos, que ya es premio.

Y es que Isco no ha hecho más que mermar en protagonismo y presencia desde que debutara en el Valencia y después diera el verdadero salto al protagonismo en el Málaga. De los 3.064 minutos de la campaña 2012/13 ha pasado a los 1.186 de la temporada 19/20, y lo peor no es eso, sino que su incidencia en el juego es cada vez menos importante. Es más, esta nueva decisión del Madrid, meditada desde hace temporadas, viene dada porque ya ni siquiera se cree que aporte equilibrio y control al juego, y son ya demasiadas voces las que le acusan de ser un jugador que lastra a sus compañeros por su pobre estado físico. Veremos si el Madrid logra quitarse de encima en invierno a un futbolista que tiene contrato hasta 2022.