¡Gerard Piqué la lía como nunca! Y es por esto que ha hecho

Gerard Piqué ha sido noticia en los últimos días después de las entrevistas que concedió a diversos ‘youtubers’. Como de costumbre, no se calló nada, y no tuvo reparos en exponer públicamente su opinión y en hablar claro, aún y a sabiendas de las críticas que podía recibir. Una faceta que el central del Barça siempre ha mostrado sin importar la opinión del resto, y que hace que suela caer mal entre los aficionados rivales. Dicen que o le odias o lo amas, no hay término medio.

Entre sus citas más célebres, destaca una en la que afirmó que el 85% de los árbitros, es decir, prácticamente todos, apoyan al Real Madrid. Unas palabras que muchos pedían que no quedaran impunes, y que el Comité hiciera su trabajo, para defender la honestidad y el trabajo de los colegiados, y recibiera algún tipo de sanción. Algo que, a decir verdad, no preocupaba en absoluto al ‘3’, que en todo momento se mostró muy tranquilo.

Sobretodo, porque, en caso de ser sancionado, cumpliría esos partidos ahora, y, como bien sabemos, está de baja tras lesionarse de gravedad, por lo que, de todos modos, no iba a poder estar disponible. Pero hoy no es noticia por lo que dijo en ese entonces, pues ya suficiente se ha hablado de ello. Por lo que se habla del catalán es por su positivo en COVID 19 hace tres semanas, del que tenía constancia tanto él como su entorno más cercano, pero nadie más.

No ha gustado nada que no lo hiciera público, y ahora se preguntan cuando grabó esas entrevistas, en las que estuvo en contacto con varias personas. Porque no salen las cuentas, valorando que debería de haber guardado esos 15 días de cuarentena reglamentarios, que puede haberse saltado. Un acto de irresponsabilidad que, en caso de confirmarse, sí que traería un importante castigo para el campeón del Mundial de Sudáfrica en 2010 y de la Eurocopa de 2012.

Tanto de parte de la Justicia, como desde el Camp Nou. Piqué, por su parte, aún no se ha expresado, y se pregunta como se ha podido filtrar ese bombazo, del que se habla en todos sitios.