Giro brutal con Piqué: asume su caída y Laporta, feliz con la decisión

El empate cosechado por el FC Barcelona ante el Inter de Milán en la cuarta jornada de la presente edición de la Champions no solo ha acercado la caída del equipo en esta competición, sino que ha dejado muy señalados a muchos integrantes de la plantilla culé, empezando por Xavi Hernández. La labor del técnico ya se está poniendo seriamente en tela de juicio y, con esto, el rendimiento de futbolistas como Gerard Piqué o Sergio Busquets, los dos jugadores más veteranos de la plantilla junto a Robert Lewandowski.

Pero es el gran capitán el que se encuentra en una situación más crítica. Al contrario que Busquets, Piqué no cuenta con apenas confianza por parte de su entrenador y de Joan Laporta y sus últimas actuaciones han desencadenado un aluvión de críticas que han hecho mella en el defensa, quien ahora parece estar abierto a cambiar de aires en el mercado invernal.

Hace dos temporadas, cuando el Bayern Múnich asestó al Barça el famoso 2-8 en dicha competición, el jugador puso de manifiesto su predisposición a salir del club para no ser una carga, una declaración de intenciones que ha ido cogiendo fuerza a base de malas actuaciones y que a día de hoy sí que supone un motivo de crispación en el club. Piqué tiene contrato hasta 2024 y siempre ha manifestado su intención de cumplirlo, pero los últimos acontecimientos podrían propulsar su salida en enero para aliviar a Joan Laporta en el plano económico y a Xavi en el seno deportivo.

Su posible nuevo destino

Hace unas semanas desvelamos en Don Balón cierto interés del Atlético de Madrid, por cortesía de Diego Pablo Simeone, en contratar los servicios Piqué, pero este parece tener también las ideas muy claras a este respecto. A sabiendas de que ya no está en condiciones futbolísticas para resultar servicial a un equipo de la élite europea, su futuro podría estar en la MLS, una competición que viene acostumbrando a protagonizar la llegada de jugadores con una trayectoria impecable en Europa, como ocurrió recientemente con Gareth Bale o como podría suceder próximamente con Luis Suárez.

Por ende, lo que está claro, por primera vez en mucho tiempo, es que Piqué podría ser útil para el Barça, pero no en el terreno de juego, sino aceptando su salida del club antes de cumplir contrato en 2024.