¡Giro en el futuro de Ronald Koeman! El Barça medita este bombazo

Hasta hace muy poco, se daba por hecho que Ronald Koeman iba a seguir en el Barça durante otra temporada, e iban a respetar su contrato. No obstante, ya nadie se atreve a darlo todo por cerrado, pues la situación puede haber cambiado de manera radical. El motivo no es otro que los resultados que vienen cosechando, pues la derrota ante el Granada, tras comenzar ganando el partido, todavía escuece mucho. Y el empate contra el Atlético de Madrid de Diego Pablo Simeone no es un buen resultado tampoco.

Lo cierto es que, una vez más, el técnico holandés fue demasiado conservador, y jugó más con el miedo a perder, que con la intención de ganar. Y eso que el empate claramente beneficiaba a los colchoneros, que pudieron conservar el liderato de La Liga Santander otra jornada más, y se beneficiaron del empate del Real Madrid contra el Sevilla. Además, otra vez fueron inferiores en un partido grande, algo que ya no sorprende a nadie.

No han sido capaces de vencer a ningún grande de Europa, a excepción del Sevilla, y siempre ha sido superado en la pizarra por el resto de técnicos. A Joan Laporta ya se le está acabando la paciencia, y por eso piensa seriamente en rescindir el contrato del ex del Everton, el PSV Eindhoven, el Valencia, el Southampton o la selección de los Países Bajos. Porque está claro es que, con él en el banquillo, no pueden tener demasiadas aspiraciones, visto lo visto.

Koeman, por lo tanto, afronta unas semanas decisivas. Si consigue acabar ganando el título, cosa que parece complicada, acabaría con todas las dudas del tirón. Pero ya no solo es que no dependan de sí mismos, si no que tienen que espera que ‘pinchen’ los colchoneros, y los de Zinedine Zidane. E incluso corren el riesgo de acabar en la cuarta plaza, pues el Sevilla de Julen Lopetegui está a cuatro puntos. Se avecina un final de curso verdaderamente épico.

Probablemente, el más dramático de todos los tiempos. Veremos a ver quien sale como el gran ganador de la contienda.

La emoción está servida.