Ídolo del Bernabéu, gran aliado de Di María y Cristiano y nuevo equipo
El jugador vuelve a protagonizar un cambio de aires en su carrera
Mesut Özil forma parte de ese elenco de futbolistas que durante algunos años dejaron entrever que se convertirían en estrellas mundiales, pero el paso del tiempo y sus decisiones han sido estrepitosas para ellos. El alemán de origen otomano aterrizó en el Real Madrid en el año 2010 a cambio de 18 millones y ya en sus primeras apariciones con la elástica blanca enamoró al Bernabéu junto a otras estrellas como Cristiano Ronaldo, Ángel Di María, Kaká o Karim Benzema.
El mediapunta logró coger el timón del juego merengue y deleitar a los aficionados merengues con su depurada técnica y su estratosférica visión de juego, pero su salida del club en 2013 supuso el principio del fin para él. Aunque su llegada al Arsenal generó unas expectativas muy altas y Wenger le brindó la batuta del equipo, las prestaciones del alemán no fueron tan dulces como en su anterior etapa en Madrid, donde llegó a convertirse en uno de los mejores futbolistas del mundo.
Poco a poco su peso en los Gunners fue decayendo hasta que el verano pasado el jugador decidió volver su país de origen, Turquía, tras la oferta del Fenerbahçe. Tras un año sin grandes actuaciones en el equipo capitalino, ahora Özil vuelve a protagonizar un nuevo cambio de aires en su trayectoria profesional, aunque sin salir de las fronteras otomanas: tal y como se ha hecho oficial recientemente, el mediapunta de 33 años se ha incorporado a la disciplina del Estambul Basaksehir FK, equipo que en los últimos años está apostando por jugadores de renombre que ya no están a su mejor nivel.
La salida de Özil del Real Madrid supuso un jarro de agua fría para los aficionados del Bernabéu, quienes pudieron disfrutar de sus geniales cualidades durante tres campañas, pero los cuales no entendieron el motivo por el que el jugador decidió aceptar la propuesta del Arsenal.
Pronto el propio Mesut se dio cuenta del error garrafal que había cometido dejando atrás Chamartín y, a partir de ahí, su carrera comenzó un declive que ha terminado eclipsando los buenos años que ofreció en el Bernabéu como un aliado top para de los mencionados CR7, Di María y el resto de estrellas del equipo.