Imanol Alguacil se lo veía venir y el City Group no esperará más, notificación de ofertón inminente

Imanol Alguacil siempre ha sospechado del Manchester City en este asunto porque ya en el pasado Pep Guardiola quiso ficharlo y su actual estado de forma no hace sino confirmar que ha vuelto; eso, unido a la crisis profunda que atraviesa el equipo skyblue, formaliza un nuevo ataque, dicen, inminente.

Al técnico de Sampedor se le han caído todas sus estrellas, ninguna rinde y en bloque lo hacen mal, de modo que, dado que ha renovado, quiere cambios y estos pasan por uno y hasta dos jugadores de la Real Sociedad. Todos están esperando el ataque por Martín Zubimendi, pero desde la ciudad del norte de Inglaterra certifican que el nombre que figura el primero de la lista de deseos no es el pivote, sino Mikel Oyarzabal.

Movimientos en la plantilla inglesa

Antes de la gravísima lesión de rodilla de Oyarzabal, el punta ya estuvo en la agenda del Manchester City en general y de Pep Guardiola en particular, de modo que no es nuevo que así suceda, sin embargo se informa de energías renovadas en los citizens tienen peligro para la Real Sociedad.

Y es que se prevé una limpieza importante en la plantilla inglesa, con salidas de jugadores considerados hasta hace meses estrellas mundiales, como por ejemplo Kevin de Bruyne y veremos si no también Erling Haaland, y eso exige movimiento y cambio.

Perfil Guardiola y un futbolista perfecto para el juego citizen

Capaz de jugar casi en cualquier demarcación de la franja de ataque, Oyarzabal aúna muchas cualidades dignas del City: puede hacer las labores de un delantero referencial capaz de generar segundas jugadas, de caer a banda, de aparecer desde la segunda línea o moverse por delante de los centrales rivales como 10. Y, a la vez, tiene calidad y percepción para la asociación, además de gol.

Con todo eso en sus botas y el nivel estelar que poco a poco está volviendo a tener, y si a eso unimos que el City necesitará fichar tras varias salidas importantes, entonces podemos hablar para la Real de un problema, nunca mejor dicho, real, viene de la Premier League y del peor club posible.