¡Incendio en 'Can Barça'! Bartomeu toma la decisión y ahora Messi duda
Al crack blaugrana no le gusta la deriva del club
El malestar recíproco entre la junta directiva del FC Barcelona y la plantilla del primer equipo de fútbol es latente, lo ha sido durante gran parte de la temporada y es el principal foco de preocupación interna del presidente Josep Maria Bartomeu. El otro gran problema es el económico, agravado con la crisis sanitaria por el coronavirus y que puede dejar al club en una situación económica complicada, si no lo está ya. Ambos aspectos (con el fin de fortalecer su posición al frente del club) pretende diluirlos un presidente que ya ha dado el primer paso para agrandar su figura por encima del resto en la entidad catalana.
Y eso no gusta a muchos ex directivos, candidatos al puesto de Bartomeu –algunos viejos enemigos conocidos- pero tampoco a ciertos futbolistas que ven al club sin un rumbo fijo y con importantes lagunas en su gestión. Entre estos futbolistas está un Leo Messi que recordemos puede abandonar el Barça cuando le plazca a temporada finalizada. Por ahora el astro argentino no se lo plantea, pero hay asuntos que pueden hacerle cambiar de opinión.
Y uno importante es la frustración. Sí, porque Leo quiere un equipo ganador, con bazas de peso para optar a la preciada orejona y con unos compañeros que ya de inicio le den la confianza necesaria como para creer que se puede optar a todos los títulos. Y el hecho de que el club esté en dificultades económicas, unido a que la sombra de la sospecha siempre planee sobre la junta directiva, no ayuda.
Tampoco lo hace el último anuncio del club, bajo comunicado oficial, en el que el máximo mandatario blaugrana se ha rodeado de un núcleo duro con el que afianzar su poder al frente de la institución de la Ciudad Condal. Bartomeu parece ahora mismo inevitable. Y si a eso añadimos el ventilador de lodo que supone el llamado Barçagate y la reciente querella interpuesta por la entidad contra el ex vicepresidente Emili Rousaud, parece que la herida dolorosa en vez de sanar se llena de sal. Leo piensa que así es complicado trabajar; al fin y al cabo, no nos engañemos, el ruido afecta, más aún si los resultados no llegan. El Barça juega con fuego.