Joan Laporta lo quería como sucesor de Xavi, descubrió a Pau Cubarsí y ahora dejará tirado al Barça

Con la pretemporada ya lista para comenzar, el FC Barcelona se ha encontrado con un serio problema en su estructura formativa. Y es que, cuando parecía que, al menos, en el Barça Atlètic se respiraba cierta estabilidad gracias a la figura de Rafa Márquez y a los buenos resultados cosechados a lo largo de la pasada temporada, ha sido el propio técnico mexicano que ha echado por los aires toda sensación de tranquilidad con su salida.

Con la salida del Káiser de Michoacán más que confirmada, Joan Laporta ha visto como uno de sus hombres de máxima confianza dentro del club rompía con todo para incorporarse al cuerpo técnico de Javier Aguirre en la selección de México. Un puesto que, pese a no darle las riendas de un equipo, sí que lo acerca a la máxima élite y lo aleja del filial blaugrana, de donde, por ahora, no se le veía una salida próxima hacia el primer equipo del Barça.

Pérdida muy sensible para Laporta

Como hemos dicho, Márquez era un empleado de la máxima confianza del presidente. Tan era así, que en su momento, cuando el club buscaba un relevo para Xavi, Laporta puso encima de la mesa el nombre de Rafa Márquez, que, pese a su inexperiencia, tenía la absoluta confianza de su presidente, pese a que finalmente se impuso la experiencia y el inmaculado currículum de Hansi Flick.

Curiosamente, el camino que ahora está siguiendo Márquez es calcado al del alemán, sale de un filial para formar parte del cuerpo técnico de su país, para después volver al club de su vida como entrenador del primer equipo.

El primer descubridor de Cubarsí

Además, si bien es cierto que gran parte del mérito de haber sacado a la luz a Pau Cubarsí, fue de Xavi, la realidad es que el primero que apostó por el central catalán fue Rafa Márquez. Y es que el mexicano ya contaba con el joven de 17 para el Barça Atlètic. Lo hizo durante 9 partidos de liga, antes de que comenzara a estar siempre convocado con el primer equipo.