Joan Laporta tiene otra gran preocupación con un titular del Barça

Joan Laporta afronta una serie de problemas que están pendientes de solucionarse en el Barça. Y es que, además de las numerosas salidas que quiere cerrar, para aligerar masa salarial, y poder inscribir a los nuevos fichajes, también está obligado a sellar la renovación de varias piezas. Porque hay casos como los de Ousmane Dembélé, Anssumane Fati o Ilaix Moriba, que cuentan con la total confianza de Ronald Koeman, y quedan libres en 12 meses.

Después también tendríamos a otros que finalizan su vínculo en 2023, por lo que no se pueden relajar ni despistar. Y en esta ecuación, es donde aparece la figura de un Ronald Araújo del que se viene hablando bastante estas últimas semanas. Porque ya ha sido colocado en el radar del Paris Saint-Germain de Mauricio Pochettino, y en especial, del Atlético de Madrid de Diego Pablo Simeone. Dos opciones realmente interesantes y tentadoras.

El charrúa dice sentirse muy feliz y a gusto en la ciudad condal, pero no niega que le pica la curiosidad, y que la opción de estudiar las ofertas que le llegan no está descartada. En especial, si en el Camp Nou no pueden garantizarle la titularidad, pues acabó bastante decepcionado, al ver que, pese a su gran rendimiento, en muchos partidos Oscar Mingueza y Clément Lenglet le pasaron por delante. Algo que no entiende, ni él, ni nadie.

Para colmo, las cosas pueden complicarse más aún, después de la llegada de Eric García desde el Manchester City de Pep Guardiola, que es la gran apuesta de presente y de futuro de la entidad. El internacional español contará con un papel protagonista, presumiblemente, y todo hace indicar que el gran perjudicado será el ex de Rentistas y de Boston River. En los próximos días, el uruguayo y su agente se sentarán con Laporta y con Koeman para hablar sobre el tema.

Más que el aspecto económico, lo que importa a Araújo es seguir con su crecimiento, y disponer de continuidad. Su sueño sigue siendo triunfar en el Barça, y peleará por ello. Pero no quiere vivir en el banquillo.

Eso también lo tiene claro.