Jordi Alba en la cuerda floja: el relevo en el que ha pensado el Barça

En las últimas horas, Jordi Alba ha estado en boca de todos, y no precisamente por algo bueno. Porque se ha filtrado que el internacional español, que no ha sido llamado por Luis Enrique para esta última convocatoria, se ha negado a bajarse el sueldo. Y era una de las condiciones que Josep María Bartomeu le ponía para seguir en el Barça el curso que viene. Y es que hace tiempo que el de L’Hospitalet de Llobregat dejó de rendir a su mejor nivel.

Bien por las lesiones, y por su edad, 31 años, pero ya no es el mismo de antes. No está justificando su elevado salario, y, teniendo en cuenta que las arcas azulgranas no están para mucho, le pedían ese favor. Pero el ex del Valencia y el Gimnástic de Tarragona, en un acto de egoísmo, se ha negado, y asegura que, antes de perder dinero, prefiere marcharse a la Premier League, donde tiene ofertas. Algo que no ha sentado nada bien en el Camp Nou, como es lógico.

Además, Ronald Koeman tampoco le considera intocable, y no vería con malos ojos su marcha, pues ya le han avisado que es una de las manzanas podridas del vestuario. De momento, se entrena con normalidad, como uno más de la plantilla, y no hay novedades acerca de un posible adiós. Pero, en caso de llegar una oferta, se estudiará detenidamente. Y si coincide con el valor que le dan, ni mucho menos está descartado que sea traspasado.

En el Barça están preparados para lo que pueda suceder, y ya habrían pensado en su posible sucesor. Se trata de Yuri Berchiche, del Athletic Club de Bilbao, que ha protagonizado una temporada para enmarcar, siendo, probablemente, la mejor de su carrera. Lástima que eso no le haya valido para ir a ‘la Roja’, pues han optado por llevarse a José Luís Gayá y a Sergio Reguilón antes que a él. Pero ya habrá más oportunidades.

El ex de Eibar, Real Sociedad y Paris Saint-Germain ha sido uno de los mejores en San Mamés. Sobretodo, en Copa del Rey, marcando varios goles, y ayudando a que los ‘leones’ alcancen la final, que aún está por disputarse.

Eso si, no será barato llevárselo.