Jorge Mendes contacta con el Barça para ofrecerle un fichaje sorpresa
Joan Laporta quiere hacer buenas migas con él
Jorge Mendes espera hacer negocio con el Barça, como lo hizo en el pasado con el Real Madrid, donde ahora es considerado ‘persona non grata’ para Florentino Pérez. En cambio, a Joan Laporta le interesa tenerle contento y hacer buenas migas con el polémico representante de futbolistas, ya que en su nómina de clientes tiene, entre muchos otros, a Anssumane Fati. Es decir, que tiene el toro cogido por los cuernos, y así lo desea, puede destrozar a la entidad azulgrana desde dentro.
Por eso quiere tener una relación cordial con el agente luso, pues su experiencia con Mino Raiola le dice que es mejor ser amigos, que enemigos. Y es que eso te da ciertas ventajas a la hora de fichar a varios cracks de primer nivel. El último ejemplo de eso puede ser Pedro Neto, al que han puesto sobre la mesa, y al que ven con un potencial de locura. Así lo ha demostrado esta campaña, siendo una de las revelaciones de toda la Premier League.
A sus 20 años, se ha hecho con un puesto como titular indiscutible en el Wolverhampton Wanderers de Nuno Espirito Santo, enviando a Adama Traoré al banquillo. Tras un primer año de adaptación, el canterano del Sporting de Braga se ha asentado en el once inicial, y no ha decepcionado con su rendimiento. Es rápido, ágil, tiene una habilidad y una técnica brutal y no le ha pesado la responsabilidad a la hora de tener que decidir encuentros.
El último ejemplo de ello fue este fin de semana, dando los tres puntos a los ‘Wolves’ frente al Southampton. Marcó una diana de bella factura, que le permite alcanzar las cinco esta temporada, además de otros tres pases de gol, unos números realmente buenos. Ya es internacional con la selección absoluta de Portugal, con la que se estrenó marcando en su debut, y su gran objetivo es estar en la Eurocopa que se celebra este verano.
Mendes ya ha hecho saber en el Camp Nou de la existencia de Neto, que también pasó por la Lazio, y que fue compañero de Francisco Trincao.
Pero el bueno de los dos era Pedro.