Jorge Mendes se la lía al Barça y le quita un objetivo para la defensa

Jorge Mendes tiene un gran poder en el Wolverhampton Wanderers, como se puede ver en su plantilla. Porque dispone de muchos clientes jugando allí, como es el caso de Rubén Vinagre, Fabio Silva, Rui Patricio, Roderick Miranda, Rubén Neves, Pedro Neto… y hasta el entrenador, Nuno Espirito Santo. Y es un hombre con importancia, donde su palabra se tiene muy en cuenta, pues les ha ayudado a crecer una barbaridad, primero, consiguiendo el ascenso desde la Championship.

Y luego, asentándoles en la Premier League. Y no ha dudado en echarles una mano en todo momento, incluso, con jugadores que no están entre su cartera de representados, como Raúl Jiménez, que ha renovado recientemente su contrato, o, este último, Rayan Ait-Nouri. Porque ha hecho todo lo que ha podido para que uno de los laterales zurdos más prometedores e interesantes desembarque en el Molineux Stadium, a pesar de las ofertas.

Comparado con Jordi Alba o Raphaël Guerreiro, esta joven joya de solamente 19 años fue anunciada a lo largo del día de ayer. Llegará para aportar más competencia y fondo de armario en el carril zurdo, y después de un gran desempeño en las filas del Angers. Allí, era titular indiscutible, a pesar de su temprana edad, lo que le había llevado a defender los colores de la selección francesa sub 18, sub 19 y sub 21. E incuso, a ser tanteado por Argelia, para la absoluta.

Clubes muy importantes, como el Tottenham Hotspur, el Manchester United, el Olympique de Lyon, o incluso, el Barça, le tenían controlado. Josep María Bartomeu manejaba muy buenos informes acerca de su potencial y de su evolución, y le recomendaban seguirle de cerca. Pero su próxima parada será el ‘Wolves’, que ha conseguido hacerse con su cesión, de cara al próximo curso, y que se guarda una opción de compra.

Mendes ha tenido mucho que ver, y ha ayudado en todo lo posible para que firme por un conjunto que no ha tenido el mejor de los comienzos, y que suma seis puntos de doce posibles.

Eso si, siempre puede ser peor, eso desde luego.