Jürgen Klopp se la juega a Koeman: rompe el trato y desecha al Barça

A pesar de que el FC Barcelona tiene un compromiso de alto calibre en la noche de hoy frente al Sevilla con motivo de las semifinales de la Copa del Rey, los mayores colosos del continente no le pierden la cara al mercado de fichajes veraniego por lo que pueda pasar dentro de unos meses. Es por eso que, aunque el cuadro culé le ha seguido muy de cerca en los últimos tiempos, Georginio Wijnaldum tiene un preacuerdo sellado con el Inter de Milán que dirige Antonio Conte.

Según han confirmado diversos medios británicos, el cuadro nerazzurro ha lanzado una tentativa en la última ventana de invierno por el centrocampista del Liverpool pero, debido a las innumerables lesiones que alberga en su plantilla Klopp, no ha querido desprenderse de ninguno sus efectivos… y muchos menos si es uno tan importante como el futbolista holandés. Eso sí, a pesar de ser un fijo en el esquema del germano, el jugador no parece estar por la labor de renovar su vinculación con los reds y está decidido a poner tierra de por medio con Anfield para recalar en el Inter de Milán.

Sí, porque a pesar de que Koeman habló personalmente con él en los últimos meses estivales para tratar de cerrar su llegada por unos 25 millones de euros, el jugador fue retenido por un Klopp que no está dispuesto a servirle en bandeja a uno de sus mejores efectivos a un rival directo como el Barça (por eso ya tiene un preacuerdo verbal con los italianos)… aunque Koeman tenía muchas esperanzas de poder hacerse con él a coste cero en la próxima ventana de movimientos.

Eso sí, el técnico neerlandés, a pesar del interés que tiene en el futbolista para perfilar su plantilla el año que viene, no tiene asegurada la dirección del vestuario a dos meses de que termine la temporada y este sprint final se ha postulado como decisivo para tratar de convencer a la nueva directiva culé, que saldrá electa en pocos días. Por ende, si el blaugrana logra dar un golpe sobre la mesa en alguna de las dos competiciones en las que aún tiene opciones (Copa del Rey y LaLiga), tendrá que ir buscando otras alternativas en el mercado para revitalizar un centro del campo que este curso apenas ha hecho balance a las expectativas depositadas: varios señalados y pocas opciones, gran revés para los intereses del FC Barcelona.