Koeman está sin estrenar y Messi y Suárez firman su caída: crisis culé

El Barcelona ha comenzado ya la cuenta atrás para el inicio de una nueva temporada y antes de que todo se ponga en marcha ya empiezan a surgir los diablos del pasado, del más reciente. Táctica y físicamente el equipo ha bajado dos escalones desde la última etapa de Ernesto Valverde, que fue el último entrenador capaz de gestionar el vestuario y sacar adelante la competitividad de jugadores acomodados pero de una calidad superior. Y entre ellos están dos que comandarán un año más la nave blaugrana: Leo Messi y Luis Suárez, y los dos firman de antemano la sentencia de Ronald Koeman, nuevo entrenador del Barça.

Y lo hacen porque la idea del técnico neerlandés según aterrizó en Barcelona era renovar el vestuario y desechar a ciertas piezas que a su juicio no encajaban en su nuevo enfoque de plantilla. Pues bien, una de ellas, Luis Suárez, es la conexión con Leo Messi y es también el elegido por el argentino como salvoconducto de tranquilidad durante la temporada en la relación del crack con la directiva y el club. Dicho de otra forma, si Luis Suárez se queda, Messi no levantará incendios.

Tragando con el uruguayo, el Barça tampoco asegura ya la salida de otro de los ilustres descartes: Arturo Vidal, al que no se le encuentra acomodo lejos del Camp Nou. Y unido a ello, con el 10 y el 9 listos y dispuestos, la complicación le viene ahora por parte de Antoine Griezmann y Philippe Coutinho, que han pasado en unos días de liderar el proyecto a verse relegados, como mínimo, al tercer y cuarto lugar. Si a eso sumamos que los dos anhelos de Koeman, Depay y Wijnaldum, se complican, entonces el preparador holandés se ve ya, antes de estrenarse en liga, acorralado por los fantasmas que han hundido al Barça en la última campaña y media.   

En liga el primer rival culé será un renovado Villarreal que puede incendiar la estructura catalana hasta sus cimientos si el equipo de Tintín comienza con derrota la competición doméstica. De la misma manera, Koeman puede esperar un panorama desolador en Champions, donde los mismos jugadores que tiene a su disposición han sido un juguete roto durante estos años. En la refriega europea, la grandeza de un rival y el estado físico superior de este han bastado temporada tras temporada para hacer caer a los blaugranas, que además han encajado importantes e históricas goleadas, la última hace apenas un mes. 

Así las cosas, el nuevo Barça de Koeman no lo es tal, de hecho se parece alarmantemente al Barcelona de Setién y por tanto al del Bayern, al de Anfield, al del Olímpico... Y como es lógico los aficionados blaugranas ya se hacen notar al respecto en redes sociales.