Koeman exige su segunda condición: si no llega él, se irá del Barça
Muchas cosas van a cambiar en can Barça con la llegada del holandés
Tras dos meses de competición en los que el FC Barcelona ha atravesado todo tipo de adversidades, la calma parece que está retornando al club. Bueno, al menos parcialmente, ya que Ronald Koeman y Leo Messi están mantenido un tira y afloja que está poniendo en jaque las aspiraciones del equipo. El técnico holandés está creando un clima demasiado tenso para lo que están acostumbrados los aficionados en los últimos años. Leo Messi ha pasado de ser un jugador clave en las aspiraciones del club a ser uno más en la plantilla ya que con él en el campo el equipo juega altamente condicionado.
Por ello, para la fase importante de la temporada el técnico holandés quiere atar a los dos propósitos que no pudieron llegar en verano pero que actualmente están forzando su salida de sus respectivos clubes: Memphis Depay y Georginio Wijnaldum. Los dos han sido las preferencias Koeman en los últimos meses, pero Bartomeu le negó su llegada al no poder hace frente a sus costes.
No obstante, varios jugadores de la plantilla del club están a punto de abandonar Barcelona por los pocos minutos de los que disponen y podrían dejar en las arcas la cantidad necesaria para lanzarse a por los holandeses. Júnior Firpo, Carles Aleñá, Riqui Puig y Martin Braithwaite están sentenciados por el entrenador y están buscando sendas salidas lejos de la ciudad condal.
La llegada de Depay se presta bastante sencilla ya que el jugador esta forzado su salida del Olympique de Lyon y está dispuesto a lo que sea por tal de vestir la elástica blaugrana a partir de la próxima estación invernal.
Por su parte, el centrocampista holandés, que viene de firmar una sensacional actuación con su selección (anotando un doblete), tiene claro que le gustaría enfilar rumbo a Barcelona, pero las repentinas bajas que está sufriendo el Liverpool en este primer tramo de campaña -Virgil Van Dijk, Joe Gómez y Fabinho se encuentran en la enfermería del club- podrían dinamitar sus deseos, ya que Jürgen Klopp cuenta hoy en día con un número muy limitado de efectivos en la plantilla.
Dos peticiones que deberá tratar de cumplir la nueva directiva del Barça para que el holandés continúe al mando del equipo la próxima temporada. De no ser así, se despedirá del club solamente un año después de haber aterrizado en Barcelona.