Koeman hizo bien en descartarlo: el fichaje que hubiera sido una ruina
No hubiera acertado incorporándole al Barça
Thiago Silva fue objeto de deseo del Barça durante mucho tiempo. Estuvo realmente cerca de llegar en varias ocasiones, siendo la primera de ellas cuando estaba en el AC Milan, y era considerado como el mejor defensa del planeta. Finalmente, en 2012, acabó marchándose al Paris Saint-Germain, a cambio de 42 millones de euros, donde se convirtió en el capitán nada más llegar, y donde es una leyenda y un emblema. Allí, consiguió grandes cosas.
Estuvo ocho años, y se despidió el pasado verano, quedándose a las puertas de levantar la Champions League, su gran objetivo. Su último partido fue el que disputó contra el Bayern de Múnich, perdiendo en la final por la mínima. Y sonó para reforzar varios clubes, aprovechando que quedaba libre, siendo el conjunto azulgrana uno de los grandes favoritos. Porque nunca ha ocultado que le gustaría probar suerte en La Liga Santander.
Una opción que Josep María Bartomeu se planteó seriamente, pero que Ronald Koeman desechó sin dudarlo. No creía que fuera de ayuda, y, además, no percibiría un salario nada bajo. A sus 36 años, no hay duda de que los mejores días del internacional brasileño ya quedaron muy atrás, y afirmaba que ya no estaba preparado para jugar al más alto nivel. Así que el ex de Oporto, Fluminense o Dinamo de Moscú acabó en la Premier League, que también le seducía.
Concretamente, en el Chelsea, en el que empezó jugando, y siendo muy importante, todavía con Frank Lampard en el banquillo. Pero todo cambió desde que el inglés fue destituido, y Thomas Tuchel asumió el cargo, ya que, desde entonces, su rol ha sido completamente secundario. Y, este fin de semana, tenía la oportunidad de reivindicarse, pues formó parte del once inicial que salió ante el West Bromwich Albion. Pero fue expulsado en la primera mitad.
Silva vio la tarjeta roja cuando los ‘blues’ iban por delante en el marcador, y acabaron siendo goleados. De este modo, fue el responsable de acabar con la racha de imbatibilidad que tenían desde que llegó el que ya había sido su técnico en el PSG.
En el Barça hubiera tapado la progresión de Ronald Araújo.