Koeman le echa para que llegue un crack pero Bartomeu no le fichará

Tras llegar como un fichaje esperanzador con toda la experiencia del mundo en sus piernas hace dos temporadas, Arturo Vidal ha salido por la puerta de atrás del FC Barcelona y ya se ha puesto a las órdenes de Antonio Conte en el Inter de Milán.

Pese que ha sido un jugador sumamente utilizado durante su estancia en Barcelona con Ernesto Valverde y Quique Setién como entrenadores, la llegada del técnico holandés Ronald Koeman ha provocado que el jugador tenga que abandonar el club, además, de una forma poco elegante.

El nombramiento de Koeman como nuevo director de orquesta del Barça no ha dejado indiferente ni a sus jugadores ni a su afición. Varios futbolistas de la plantilla no cuentan para él y tendrán que buscarse la vida lejos del Camp Nou. El centrocampista chileno es uno de ellos, y tras una severa disputa para aclarar las condiciones en las que abandonaría el club, el Inter de Milán ha logrado hacerse con sus servicios a cambio de poco menos de un millón de euros.

Pese a que sus actuaciones han sido bastante destacables, Koeman ha decidido darle portazo para tratar de incorporar un jugador más joven que aporte más al juego del equipo de lo que hacía Vidal. No obstante, tras echar al chileno, el técnico ha comunicado también a Riqui Puig -una de las perlas de La Masía- que no cuenta con él. Esta noticia sí que ha causado gran estupor entre la directiva y los aficionados, ya que se presuponía que iba a ser una de las grandes piedras angulares del esquema del equipo en la próxima década. Sí, puede que lo sea, pero lejos de Barcelona.

Así pues, tras Ivan Rakitic, Luis Suárez, Nelson Semedo -rumbo al Wolverhampton-, Arturo Vidal y Rafinha, el canterano catalán tendrá que poner punto y final a su andadura en el club -al menos durante una temporada- y buscar una cesión donde pueda contar con los minutos que necesita para terminar de gestarse como jugador del primer nivel.

Ronald Koeman ha demostrado que está dispuesto a dar salida a todos y cada uno de los jugadores que no entran en sus planes y, a la espera de que lleguen refuerzos, tratará de cubrir las posiciones que han dejado libres sus descartes de la mejor manera posible con los jugadores de los que dispone actualmente. 

Por su parte y de forma contraproducente, Bartomeu no está dispuesto a realizar grandes gastos en este mercado ya que considera que el entrenador se está excediendo en el número de descartes que está realizando y la plantilla se podría quedar corta de efectivos cuando resta menos de una semana para que el equipo debute en la liga.