La Roja viste de blanco: Camavinga se cae, activados Fabián Ruiz y él
El Real Madrid está pendiente de la Eurocopa y de la actuación de ciertos jugadores de España
El producto hispano es un valor añadido para el Real Madrid ya que el triunfo de ver a un jugador español en el once blanco es sentido entre la afición merengue como una ganancia; de ahí que pese a que interesan ciertas piezas foráneas, los blancos no pierdan de vista la cita más importante de la temporada a nivel de selecciones, como es la Eurocopa. Concretamente en Concha Espina se fijan en la actuación del centro del campo de La Roja, porque alguna de sus piezas maestras puede vestir de blanco. Es más, Florentino y Zidane sienten predilección por Fabián Ruiz y Sergio Canales.
Y no sería sencillo el fichaje ni de uno ni de otro, pero desde luego que con la cada vez más complicada incorporación de Eduardo Camavinga a la entidad merengue -ya que parece renovará con el Rennes, aumentando así su valor de mercado-, activar de nuevo las opciones por el centrocampista del Nápoles y un viejo conocido de la hinchada merengue, como es el cántabro, auténtico faro del Betis, representa la nueva línea a seguir.
Sorprende entre los dos futbolistas el interés velado del Real Madrid en el jugador verdiblanco, pero lo hará menos si nos ceñimos a su rendimiento y nivel sobre el césped, que es excelso. De hecho es el máximo goleador del conjunto sevillano en lo que va de temporada con siete goles, y eso que se perdió seis partidos por lesión. Y lo bueno del internacional de Betis es que conoce el Real Madrid, su exigencia, por lo que cumplir una segunda etapa, ya consagrado, le convertiría en un valor perfecto para la medular; un digno sustituto de Luka Modric.
Por su parte Fabián es una vieja pretensión del mandatario merengue y del entrenador francés, solo que hasta el momento ha sido imposible para el club de Chamartín acercarse al jugador del Nápoles, ya que se le ha fijado un precio inalcanzable de 100 millones de euros. En cualquier caso, con Camavinga prácticamente descartado, el Madrid vuelve a mirar al centro del campo de La Roja como medida de refuerzo de presente y de futuro: el futbolista del Betis tiene 29 años y el del I Partenopei posee 24 años, ambos con muchos años de gloria aún por delante.