Laporta alegra a la afición con el Messi de 18 años: argentino y zurdo
El club cierra la compra de Lucas Román, uno de los jugadores con mejor proyección del planeta
La consecución de la Supercopa de España no solo ha significado el primer título de la era Xavi al frente del banquillo del FC Barcelona, sino que ha instado a Joan Laporta a cerrar una contratación que podría dar muchas alegrías a la entidad en un futuro no muy lejano. Lucas Román, una de las mayores promesas de fútbol argentino, cerró ayer su vinculación con el conjunto catalán y, aunque esta temporada militará en el filial, mucho ya están situándole como el nuevo Messi.
Además de ser rosarino, futbolísticamente Román se asemeja en casi todo a ‘La Pulga’. Siendo zurdo al igual que el crack del PSG, su posición ideal es el extremo derecho, un sector del que parte para iniciar sus ofensivas para, a base de regates, poder generar peligro internándose hacia el centro.
El jugador, hasta la fecha, formaba parte del Ferro Carril Oeste, club que ha abandonado recientemente tras el desembolso de 1,2 millones por parte de la entidad catalana, reservándose el conjunto porteño el 15% de una futura venta.
Tanta es la confianza de la directiva culé en la proyección del joven rosarino que Laporta ha cerrado un acuerdo con el atacante hasta 2026 a razón de una cláusula de rescisión de 400 millones de euros, una locura sin precedentes para un jugador de tan corta edad.
Además, aunque ya muchos ven en Román al relevo generacional de Leo Messi por compartir todo tipo de atributos con el seis veces ganador del Balón de Oro, el propio jugador ha dejado patente en su presentación su polivalencia: “Puedo jugar en todo el frente de ataque. Soy extremo o enganche zurdo".
Así pues, ya cerrado el acuerdo, el argentino se pondrá a las órdenes de Rafa Márquez de forma inminente para empezar a mostrar su enorme elenco de virtudes y ratificar el acierto de Laporta con su fichaje. Si en los seis meses que restan de campañas Lucas logra cumplir con las expectativas, Xavi Hernández tendrá en el joven jugador rosarino de 18 años una baza extra para componer su plantilla el próximo verano, una plantilla en la que el atacante podría ocupar el puesto de Ferran Torres o Raphinha, dos futbolistas que se encuentran en la cuerda floja.