Laporta llega con los deberes hechos al momento clave: ha cumplido
Le han bastado 100 días para hacer realidad todo lo que prometio
Cuando Joan Laporta se alzó con la presidencia del Fútbol Club Barcelona sabía que tendría que enfrentarse a un primer match ball a lo largo del verano: la Asamblea General ante unos socios que querían explicaciones de todo lo que había sucedido en el club durante los últimos dos años (responsabilidad de Bartomeu y su junta), y lo que era más importante, preguntar por el presente y el futuro, de lo que si sería Laporta el máximo responsable.
De ahí que el máximo mandatario supiese que tenía aproximadamente 100 días para poder llevarlo todo a cabo y presentarse ante los socios con las promesas electorales cumplidas. Eso le daría la tranquilidad necesaria para trabajar a gusto durante el primer año en el club, ya que los socios saldrían convencidos de que habían votado a la persona adecuada.
Los puntos en los que Laporta se ha centrado han sido la parcela deportiva, donde se ha confirmado a Koeman como entrenador tras haber recibido el no de Pep Guardiola a volver al club de sus amores, y ya se tienen fichados al Kun Agüero, Eric García y Memphis Depay (el club lo hacía oficial ayer por la tarde). Se están haciendo avances y la plantilla es ya más competitiva que la del curso pasado cuando aún restan más de dos meses de mercado veraniego.
Junto a esto se ha remodelado por completo tanto la directiva como los cargos más cualificados en diferentes áreas del conjunto catalán con la idea de que la era Bartomeu fuese historia lo más pronto posible y que no hubiese ni rastro de la herencia de esta. Ya bastante carga es la deuda galopante que ha dejado como para tener en cartera aparte de los culpables de todo aquello.
Además de explicar el pasado y el presente, la directiva culé preguntará a sus socios a cerca de su opinión con respecto a la Superliga. Serán ellos quienes den el ok o quienes fuercen a su directiva a salir del proyecto continental. En este último punto Laporta se distinguirá de su homólogo Florentino Pérez, quien lleva ya desde 2006 sin ser elegido en las urnas puesto que no se presenta oponente desde entonces y que no tiene entre sus planes abrir las urnas para realizar tal demanda a sus socios.
Tan solo 100 días han bastado a Laporta para arrancar un proyecto que ya ilusiona a unos socios que hace tan solo tres meses veían el futuro negro oscuro. Ahora ya se divisa algo más de luz.