Laporta no sabe qué hacer con él, Xavi no lo quiere ni ver y en Italia ya es la decepción del año
El lateral nunca se acabó de adaptar al juego del Barça y su rendimiento deja mucho que desear
En Can Barça la situación no está para aceptar regresos de jugadores no deseados, de hecho, no podrían estar más felices con el resultado de las cesiones de Umtiti en el Lecce y de Lenglet en el Tottenham, pues ambos apuntan a dejar el Barça después de dar un rendimiento razonablemente bueno en sus equipos. Sin embargo, con Sergiño Dest, las cosas no van igual de bien y su retorno preocupa mucho en las oficinas del Camp Nou.
El lateral diestro llegó al AC Milan con la intención que tuviera minutos con regularidad para generar interés por parte del mismo club rossoneri o de otro conjunto europeo. Sin embargo, Dest ha perdido toda la confianza de su entrenador y junto a las lesiones que ha ido acumulando, ya hace tres meses que no pisa el césped de San Siro.
El estadounidense nunca acabó de destacar en el Barça, donde se esperaban grandes cosas de él. Su paso por el Ajax elevó todas las expectativas y se esperaba que fuera, por fin, el lateral derecho del futuro en el Barça, pero su inoperancia defensiva, sumada a una toma de decisiones, como mínimo dudosa, acabó con Dest pasando más tiempo en el banquillo que sobre el terreno de juego.
Con su salida al Milán se esperaba que mejorara en dichas facetas y madurara futbolísticamente. Sin embargo, sus números no han sido nada buenos y ha acabado sumido en el ostracismo, con apenas 635 minutos jugados en toda la temporada, el norteamericano ha sido la gran decepción del año en Italia, donde seguro que esperaban mucho más de él.
Así pues, hay gran preocupación en la directiva del Barça, el jugador no gusta nada a un Xavi que no lo quiere ni ver y la economía no está como para tener a jugadores con los que no se vaya a contar. Sin embargo, se hace muy complicado imaginar algún club interesado en fichar a un Dest que lleva tres meses sin jugar y que cuando lo ha hecho ha sido dando un nivel muy bajo. Toda una ruina el fichaje del estadounidense por el Barça.