Laporta sigue siendo el rey: fin a la crisis y roba crack a 'Floren'
El candidato blaugrana, a un mes de las elecciones, es el rival a batir
Joan Laporta lo tiene todo medido y bien medido. Pese a no ser el candidato que lleva más tiempo preparando para estas elecciones, ha logrado recortar la distancia con los que sí llevaban años como Víctor Font y Toni Freixa hasta adelantarles por el exterior sin miramiento alguno. Cuando estamos a menos de un mes para que se celebren las elecciones, (domingo 24 de enero) Laporta se ha situado ya, gracias a lo que llevamos de precampaña, como el máximo favorito de los 9 posibles candidatos a la presidencia.
Más allá de la pancarta, a escasos metros del Santiago Bernabéu, que no deja de ser un duro golpe mediático al resto de contrincantes, Laporta tiene proyecto y equipo, y lo que gusta aún más a los socios culés, experiencia. Algo que no pueden decir el resto de candidatos, al menos en la presidencia. El punto fuerte de Laporta será el modo en el que solucionará la crisis económica del club, que es ahora lo que más preocupa a la afición del conjunto catalán.
La medida estrella para solventar la crisis financiera será la emisión de bonos a los aficionados que deseen invertir en el club, que se calcula serían unos 300 millones. Junto a esto, Joan Laporta propone un acuerdo con el banco de inversiones Goldman Sachs que ayudaría a sufragar el ahora congelado proyecto de nuevo estadio y la modernización de instalaciones del equipo catalán, el “Espai Barça”. Junto a ello, el ex presidente ha hablado del “Barça corporate”, una nueva unidad de negocio que comenzaría a explotarse en un futuro cercano y en el que se incluirían el Barça Innovation Hub, las Barça Academies y Barça Studios. Sería una nueva fuente de ingresos diversificando las actividades a realizar y aprovechando el fortísimo tirón que tiene el equipo en todo el mundo.
Pero Laporta no se olvida de la otra parcela, la deportiva. Joan es consciente de que la primera plantilla debe rejuvenecerse para mirar hacia el futuro, algo que ya hizo en 2003 cuando él llegó al club por primera vez. Por ello, su equipo ha contactado con el representante de Eduardo Camavinga, centrocampista del Rennes que interesa al Real Madrid desde hace varios meses. De llegar a un acuerdo con el futbolista, Laporta daría un golpe sobre la mesa muy fuerte.
Lo que está claro es que con Laporta en la presidencia, el Barcelona volverá a tener un liderazgo claro y marcado, que es justamente lo que ha faltado en un club que lleva meses deambulando a la deriva.