Leo Messi da cinco nombres: no se merecen estar en el Barça

Pide que lo ocurrido en Cornellá no se olvide

Leo Messi da cinco nombres: no se merecen estar en el Barça

Mucho se reían en el Barça tras la eliminación del Real Madrid en semifinales de la Supercopa de España, a manos del Athletic Club de Bilbao de Marcelino García Toral. Y el karma actuó, pues, pocos días más tarde, tuvieron que quedarse callados al ser derrotados en la final por los vascos quedándose sin título. Y muy cerca estuvo de suceder lo mismo en la Copa del Rey, en la que el Alcoyano, de Segunda División B, eliminó a los de Zinedine Zidane.

Per es que los de Ronald Koeman necesitaron de la prórroga, tras fallar dos penaltis, para echar al Cornellá, de la misma categoría, y que venía de cargarse al Atlético de Madrid de Diego Pablo Simeone. Un duelo en el que Leo Messi no estuvo, por sanción, y que dejó varias víctimas, comenzando por el técnico holandés, que sigue en la cuerda floja. Aunque, sí hay que señalar a alguien, el primer nombre que se pasa por la cabeza es el de Miralem Pjanic.

Pjanic

Falló una pena máxima, que se supone que es una de sus especialidades, y volvió a cuajar un encuentro horrible. A sus 30 años, le trajeron para que diera un rendimiento inmediato, y no lo está haciendo. No pueden esperar mucho más, y a día de hoy no es ni la sombra de lo que fue en su día en la AS Roma, o, en especial, en la Juventus de Turín de Cristiano Ronaldo. Lo mismo que Antoine Griezmann, que esperaban que tirara del carro.

Lo hizo en la campaña anterior contra el Ibiza, pero aquí estuvo desaparecido. Poco se puede decir del galo que no se haya dicho ya, y cada día su tumba es más profunda. Martin Braithwaite, por su parte, camufló su horrenda actuación con un gol en el último minuto, para poner la sentencia, pero lo cierto es que tampoco intervino, ni generó peligro. Poca culpa se le puede echar, eso si, pues ya se sabía que no tenía nivel para estar en el Camp Nou. Solo lo ha dejado patente.

Y por último, Junior Firpo y Francisco Trincao. Especialmente sangrante es el caso de este último, que empezó con mucha fuerza.

Lo mejor es que se vayan a la calle.