Leo Messi da un nombre propio: esta es la ‘manzana podrida’ del Barça
Es un jugador que no hace ningún bien al club
Leo Messi nunca se ha mordido la lengua, ni ha tenido problemas en ‘mojarse’ y dar nombres propios. Además, ahora está en completa sintonía con el presidente del Barça, una cosa que no tenía desde hace mucho tiempo, pues con Josep María Bartomeu tenía una relación nula. Con Joan Laporta, en cambio, puede hablar sobre cualquier tema, y siempre se siente apoyado y escuchado. Por eso, puede renovar su actual contrato.
Ya ha conversado varias veces y han acercado posturas, pues se han ido a cenar con su padre y agente, Jorge Messi, saliendo con mucho optimismo de la cita. Han elaborado una lista con las posibles altas y las bajas, planificando la plantilla que habrá, y también, por supuesto, han hablado sobre el futuro de Ronald Koeman, y el entrenador que quieren que tome los mandos. Pero el astro argentino ha hecho hincapié en una cosa: hay una ‘manzana podrida’ en el vestuario. Ni más ni menos que Gerard Piqué.
El capitán culé antes tenía una relación muy estrecha con el campeón del Mundial de Sudáfrica en 2010, pero se ha ido deteriorando con el paso de los años. Se conocen desde que eran unos simples adolescentes, pues son de la misma generación, y compartieron equipo en las categorías inferiores. Y siguieron en contacto después de que el catalán se marchara al Manchester United, para después regresar al Camp Nou, y hacer historia.
No obstante, no se le escapa a nadie que hace tiempo que dejaron de ser amigos. El motivo no es otro que la enemistad que mantienen sus esposas, Antonella Rocuzzo y Shakira, por más que hayan limado asperezas. Una discusión entre ambas fue el detonante para que Messi echara la cruz al internacional español, y desde entonces intentan cruzarse lo menos posible. Ahora bien, ¿cuál es la razón por la que el seis veces ganador del Balón de Oro ha señalado al ‘3’?
Pues esa es la imagen que da del Barça a la hora de hablar en los medios. No considera que sea un buen representante, ya que suele caer en las faltas de respeto y en las provocaciones al rival.
Una imagen que no representa los valores de la entidad.