Leo Messi es el culpable, 70 kilos para fulminar el proyecto de Koeman

El último mercado veraniego dejó varias cuentas pendientes para algunos de los mejores clubes de Europa, sobre todo en los que cuentan con más solvencia económica para realizar grandes desembolsos. El culebrón de Ousmane Dembélé y el Manchester United parecía que iba a conducir al francés a Old Trafford, pero finalmente las negociones se truncaron y el extremo permaneció en Barcelona.

No obstante, a medida que se acerca el periodo invernal de nuevo se va a acrecentando el interés de los red devils por incorporar al francés. A pesar de que hace dos meses Koeman estaba muy dispuesto a venderle para dejar en caja el dinero suficiente para fichar a Memphis Depay o Eric García (dos de sus favoritos para llegar al club), a día de hoy el atacante galo se ha convertido en un pilar fundamental en los planes del equipo y su salida decapitaría las aspiraciones del club, especialmente si tenemos en cuenta la reciente y grave lesión de Ansu Fati.

El FC Barcelona está dejando sensaciones muy dispares en estos primeros meses de competición. Un día el equipo no carbura y se deja los puntos, pero en el siguiente choque apabullan a su rival. Una inercia que en este primer tramo de campaña puede servir para establecer una idea firme de juego, pero en los momentos decisivos de la temporada el equipo no puede sufrir estos bajones si no quiere decir adiós a los títulos. 

A pesar de que ha sido sumamente cuestionado durante los primeros compromisos del curso, Leo Messi vuelve a ser el jugador que todos los aficionados del Barça querían ver. El Messi decisivo, el que no se arruga y el que está al servicio del club. El último encuentro liguero frente al Real Betis Balompié puso de manifiesto que alguno de sus jugadores más importantes se está enchufando conforme avanza la temporada, y el argentino fue el que evidenció de una mejor forma el cambio de chip.

No obstante, la buena dinámica que parece haber enderezado el equipo podría sufrir otro revés en el próximo mercado invernal: el rendimiento del argentino podría relegar de nuevo a Dembélé a un segundo plano que podría desembocar en su marcha al Manchester United por 70 millones, una cantidad que los ingleses estarían muy dispuestos a abonar cuanto antes para tratar de revertir la situación tan decrépita que atraviesan.

Koeman tiene ahora en el vestuario un arma de doble filo. Messi a su mejor versión no deja lugar a que el resto de estrellas del equipo se luzcan, pero el argentino presumiblemente se marchará a final de temporada… ¿se decidirá el holandés a retener al ex del Borussia Dortmund antes que al rosarino?