Lewandowski y Xavi podrían lograr que Ancelotti se niegue a fichar a Haaland: de ahí el sí a Mbappé
El tridente, la movilidad y la velocidad en las transiciones, clave para Barça y Madrid
Existen muchos escenarios en el fútbol moderno, pero el Real Madrid, y más el de Carlo Ancelotti, sabe a lo que va a jugar y a lo que no, de ahí que, visto lo visto y el resultado de temporadas anteriores, el fichaje del Barça con Robert Lewandowski, a todas luces y a priori, acertado, se convierte en un posible error de cálculo sobre el tipo de plantilla que se configura en base a equipos rápidos en las transiciones y profundos en ataque estático. Y eso repercute en Erling Haaland.
Problemas incluso para el City
Un equipo que domina y ataca tan bien los espacios y el bloque bajo rival, que incluso se repliega tan acertadamente como el Manchester City, ha visto que este apunte con el delantero polaco del Barça le sucede con Haaland, es decir, hablamos de goleadores puros, de anotadores de referencia y eso es a la vez virtud y trampa.
Virtud porque son eso, goleadores, jugadores que van a aportar sí o sí números, incluso esos goles que tanto hacen falta en una temporada, pero a la vez computan poco en la elaboración, la movilidad y repercuten y condicionan la velocidad. No es extraño haber vista a veces al escandinavo perdido en el ataque skyblue, como ausente. Por eso el Madrid siempre ha preferido a Kylian Mbappé.
El PSG lo aplicó
En el partido del pasado martes entre el Barça y el PSG pudo verse como Dembélé, Barcola y Mbappé, desde un dibujo planificado, eran capaces de intercambiar papeletas del centro a la derecha o la izquierda; con Haaland y Lewandowski eso no es posible, no van a caer a banda. Es más, con jugadores como el del Barça o el noruego se promueve más el juego de espaldas o las segundas jugadas, pero fijando centrales, no así con extremos, como sucede con Vinicius, Mbappé, Rodrygo, Yamal o centrocampistas abiertamente ofensivos como Bellingham o Foden. De lo previsible se pasa a lo imprevisible y Carletto apuesta por esto último.
El Madrid de Ancelotti, como el PSG, quiere espacios, movilidad y ningún estatismo, por eso Mbappé es ideal para el Madrid, por eso se duda con Haaland, por eso Lewandowski condiciona al Barça y, quizá, por eso al nueve citizen ya se le discute.