Llega el brasileño 4.0: el más barato de todos y el más hecho

Cuando aún no ha dado tiempo a poner a prueba al unísono a los tres últimos jugadores brasileños fichados por el Real Madrid (Vinicius Junior, Rodrygo Goes y Reinier Jesús), llegan noticias frescas desde el país de la samba de que un cuarto futbolista estaría a punto de cruzar el charco hacia Europa y que el Madrid es el mejor colocado para hacerse con sus servicios.

El crack en cuestión es Eduardo Gabriel Aquino Cossa o, como se le conoce ya en Brasil, Pepé. Se trata de un extremo izquierdo que juega en el Gremio y que procede de la cantera de este club ya centenario. En Brasil dicen que es la nueva joya, aunque a diferencia de los Vinicius y compañía, Pepé tiene ya 23 años, por lo que llegará a Europa más maduro que sus compatriotas, quienes tuvieron que pasar por el Castilla antes de debutar con el Real Madrid (excepto Reinier, que aún no ha tenido siquiera tiempo de dar dicho paso).

Según las noticias que llegan desde Brasil, el ojeador que el Real Madrid tiene allí de forma permanente, Juni Calafat, acaba de entregar su informe anual, como cada año cuando este está a punto de finalizar, y Pepé es el número 1 de la lista. El precio que marca su club, el Gremio de Porto Alegre, es de 20 millones de euros, lo que le hace tremendamente atractivo no ya solo para el Madrid, sino para una gran cantidad de equipos europeos. El Sevilla CF, sin ir más lejos, ha intentado negociar con el Gremio en fechas muy recientes.

Ahora bien, el máximo dirigente del Tricolor Gaucho, como allí es conocido el Gremio, prefiere realizar la venta al Real Madrid porque los blancos pagan pronto y bien, a diferencia de los métodos de pago que estaban proponiendo otros clubes como el mencionado Sevilla.

Pepé será el brasileño 4.0 que aterrice en Madrid en lapso de tan solo dos años y, aunque Vinicius y Rodrygo han dejado buenas pinceladas, aún ninguno de los tres ha logrado mostrarse al nivel que se había vendido desde el país sudamericano. Habrá que ver si Pepé, que llega más maduro y más hecho, alcanza las expectativas que en torno a él se han generado.