Luka Modric señala a su recambio en Milán: llegará en 2022 a Madrid
El jugador croata disputará un curso más en las filas blancas y luego se marchará
Las etapas deportivas siempre tienen un principio y un fin y parece que la de Luka Modric será en junio de 2022. Aunque el jugador termina contrato este año con el Real Madrid, Florentino Pérez parece estar convencido de sellar una extensión por un ciclo más dado que el centrocampista croata está siendo el mejor jugador del equipo esta temporada y se lo ha ganado a pulso.
No obstante, con 35 años no podrá seguir exhibiendo mucho más tiempo este nivel y, por ello, le ha hecho saber a Florentino el nombre del jugador que considera la mejor opción para reemplazarle cuando éste termine su etapa como futbolista merengue: Nicolò Barella.
El futbolista italiano está siendo una de las sensaciones esta temporada en Europa y, junto a Lautaro Martínez y Romelu Lukaku, acapara todas las miradas en el seno del Inter de Milán. Barella tiene 23 años y ha dejado credenciales más que de sobra para afianzar su dominio en el centro del campo durante los próximos años, ya que es un jugador que reúne numerosas cualidades futbolísticas que le convierten en diferencial en su posición.
Florentino Pérez y Zinedine Zidane ya dieron fe de las espectaculares condiciones físicas y técnicas del jugador en los dos duelos que ha tenido que afrontar el Real Madrid en la fase de grupos de la Champions League contra el conjunto nerazzurro. Barella está siendo una de las revelaciones de esta temporada y diversos medios italianos afirman que el jugador está encantado con el interés que ha germinado en Chamartín para hacerse con sus servicios, dando pie a que su fichaje se haga efectivo conforme Luka Modric abandone la disciplina blanca.
No obstante, aunque el deseo del jugador y el club son muy altos para que el trasalpino aterrice en Madrid, las arcas blancas no están en disposición de realizar desembolsos excesivamente altos por todos los jugadores que han aparecido en su lista, por lo que Florentino Pérez tendrá que prescindir de alguno de sus ‘intocables’ para dar cabida a la gran parte de las pretensiones que anhela para las próximas temporadas, una savia nueva que llegará con la difícil misión de revertir la dinámica tan negativa que atraviesa el Real Madrid en las últimas campañas: golpe de efecto.