Luz verde de Xavi y venta: el Barça finiquita otro error de Bartomeu
El jugador, sin apenas trascendencia en el conjunto catalán, saldrá del equipo definitivamente el próximo verano
A pesar de que es Joan Laporta quien está al frente del FC Barcelona a día de hoy, la gestión de Josep María Bartomeu sigue teniendo consecuencias en el club. El expresidente catalán cerró algunas incorporaciones que desde luego no pasarán a la historia de la entidad por ser las más eficientes y por fin el Barça podría finiquitar una de ellas. Si Philippe Coutinho, futbolista que costó 135 millones de euros en 2017, ha visto reducida su lista de pretendientas, Miralem Pjanic ha encontrado un destino más que atractivo para disputar los últimos años de su carrera deportiva.
Según la información filtrada por Be Soccer, el Inter de Milán está muy interesado en contratar los servicios del centrocampista bosnio el próximo verano. Pjanic, quien llegó en el año 2019 a través de un intercambio con Arthur Melo, apenas ha tenido repercusión en los planes del Barça- a pesar de que son varios los entrenadores que han pasado por el banquillo en las últimas campañas- y de ahí que Laporta cerrara su cesión al Besiktas en el mercado estival de 2021.
Sus prestaciones iniciales en el conjunto turco invitaron a pensar que el club ejecutaría la opción de compra incluida en el acuerdo, pero nada más lejos de la realidad. Eso sí, el Inter, para sorpresa de las altas esferas del Barça, ha abierto una posibilidad más que atractiva para el balcánico que congratularía a todas las partes salpicadas por el traspaso: Xavi se desprendería de una pieza con la que no cuenta para su proyecto, Laporta rescataría una cifra cercana a 8 millones por su salida y el jugador llegaría a un club con retos ambiciosos en el que poder recuperar su mejor versión, a pesar de que este tiene ya 32 años.
La figura de Bartomeu, de nuevo tocada
Como se ha mencionado previamente, Pjanic llegó a Barcelona en 2019 a través de un intercambio que causó mucha indignación en Can Barça dado que Bartomeu abrió la puerta de salida a Arthur Melo, un futbolista que cuajó un rendimiento sensacional en los dos años que estuvo en el club, y aceptar la llegada del bosnio, una operación incentivada por los 60 millones que mayores pagó la Juventus para cerrar el acuerdo.
Eso sí, el rendimiento de uno y otro no ha hecho otra cosa que dañar aún más la imagen del expresidente catalán, amén de otros movimientos que realizó durante su mandato.