Messi no será el eje del Barça, Koeman ya tiene a su galáctico fichado
El entrenador holandés ha dado un golpe sobre la mesa y lo tiene muy claro si continúa al frente del club
Aunque la Supercopa de Europa habría supuesto la primera piedra (en forma de título) para comenzar un renacimiento en el seno del FC Barcelona tras unos primeros meses catastróficos, las sensaciones evidenciadas en el terreno de juego, más allá de la derrota, pueden invitar a pensar eso.
Ronald Koeman parece haber dado con un once titular que en los últimos compromisos le está proporcionando buenos resultados y todo ello tiene una clave que hace no mucho tiempo atrás pasaba totalmente desapercibida en los planes del holandés: Frenkie de Jong. Y es que el ex del Ajax se ha erigido como el jugador más en forma de la plantilla en los últimos meses de competición, a pesar de haber tardado más de una temporada en empezar a mostrar esa versión. El centrocampista llegó a Barcelona por más de 70 millones de euros y en ningún momento de la pasada campaña dio esa sensación de poder convertirse en un jugador de época en el club, aunque ahora está tomando las riendas del equipo y él tiene mucha culpa de este resurgir futbolístico del conjunto blaugrana.
Aunque Leo Messi y Antoine Griezmann están siendo más determinantes de cara a puerta, De Jong también se está sumando, cada vez con más vehemencia, a esa faceta anotadora y ya ha cosechado esta temporada un total de tres goles y tres asistencias, unas cifras que, atendiendo a los últimos envites, seguirá acrecentándose en el segundo tramo del curso.
Koeman parece tener cada vez más claro que Leo Messi abandonará la ciudad condal conforme expire su contrato con el club y el PSG parece ser el mejor colocado para hacerse con sus servicios, aunque aún no hay nada oficial. Es por eso que el actual técnico del Barça está teniendo especial predilección por su compatriota, ya que Frenkie aún es un jugador muy joven -23 años- y sobre él podría asentarse el nuevo proyecto de Koeman al frente del banquillo culé, eso sí, si logra mantener su puesto con la nueva directiva que salga electa.
Lo que está claro es que la dinámica que atraviesa el equipo a día de hoy es mucho más positiva que hace unos meses y en el vestuario del Barça cada vez están más convencidos de poder dar esa machada en los octavos de final de la Champions League frente a un PSG que afrontará este doble duelo con la intención de sentenciar las esperanzas de Koeman de postularse como el comandante del futuro proyecto del club: golpe de efecto, el galáctico ya está en el equipo.