Messi señala a un intocable de Valverde: está en la calle (y no es Rakitic)

Leo Messi está harto de Ousmane Dembélé. El astro argentino ha señalado al francés y ha pedido a la directiva del Barça que estudie su salida este verano. Una decisión difícil de tomar, pues Ernesto Valverde sigue confiando en su potencial y cree que esta temporada puede ser la de su explosión.

El capitán culé no ha perdido detalle de la pretemporada y ha quedado muy desencantado con el rendimiento del internacional francés. Esperaba que diera un paso adelante en la pretemporada y fuera capaz de convencer, pero lo cierto es que su nivel no ha estado a la altura de las expectativas, mostrándose tan fallón, impreciso e individualista como siempre.

No encaja en el juego azulgrana y tampoco en el vestuario, donde solo mantiene contacto con el clan francés, compuesto por Antoine Griezmann, Samuel Umtiti, Clément Lenglet y Jean-Clair Todibo. Además, su profesionalidad no gusta ni un pelo, pues es muy común verle llegar tarde a los entrenamientos, o no presentarse, y es muy propenso a lesiones por su mala alimentación.

La paciencia comienza a agotarse y hay pocas esperanzas de que Dembélé vuelva a ser aquel jugador que maravilló en el Borussia Dortmund y que llevó al Barça a pagar casi 150 millones de euros por él. Leo lo tiene claro: este es el verano perfecto para venderle y recuperar parte de lo invertido, antes de que su valor de mercado caiga aún más.

Su salida dejaría una cantidad importante en las arcas, que permitiría lanzarse a por Neymar Junior. Y liberaría una ficha importante de un futbolista en plena decadencia. El Bayern de Múnich y el Liverpool de Jürgen Klopp ya se han posicionado para acogerle y podrían llegar a ofrecer cerca de 100 ‘kilos’. 

Pero en el Camp Nou solo le dejarán marchar por ofertas que superen los 120.