Messi es culpable de la decisión más dura de Koeman tras ‘El Clásico’

Aunque Leo Messi ha demostrado en las últimas temporadas que cuando está en baja forma el equipo lo nota, la llegada de Ronald Koeman le ha relegado a un segundo plano en el que apenas está siendo determinante en el juego del FC Barcelona. Ya no es que pasen pocos balones por sus pies, es que tampoco está nada fino de cara a puerta.

Desde que el técnico holandés arribó al banquillo culé, Messi no es el mismo. Menos hambre, menos juego y peores resultados. Por todo ell y por las sensaciones tan vanas que ha dejado el argentino en este primer tramo de temporada es que Bartomeu ha dado el visto bueno para que su técnico, en caso de ser necesario, relegue al banquillo al crack argentino: ultimátum de grado uno para él.

A pesar de que es el mejor jugador de la historia del club, parece que poco a poco se le está apagando esa chispa que ha mantenido durante toda su etapa como blaugrana y que le ha conducido al olimpo. Tras un verano tremendamente turbio en el que ha tenido sus más y sus menos con la directiva del Barça, Messi terminó estallando al filo de la finalización del mercado de fichajes por las condiciones impuestaa por el presidente. Tras algo más de un mes de competición en el que no ha encontrado su mejor versión, quizá tenga una de sus últimas oportunidades para demostrar que sigue siendo el mejor jugador del mundo y, precisamente, lo hará contra su víctima favorita.

El Real Madrid no llega bien al encuentro tras cosechar una dinámica terriblemente negativa en cuanto a resultados y sensaciones sobre el rectángulo de juego, y esa podría ser una de las claves para que Messi se convierta en el protagonista del partido. No obstante, de momento no ha logrado serlo ya que las portadas las están acaparando otros jugadores como Ansu Fati o Philippe Coutinho, dos de los jugadores más en forma del club.

Tanto el entrenador como el resto de sus compañeros aún tienen mucha confianza depositada en él, pero la irrupción de otros grandes jugadores en la plantilla podría convencer progresivamente a Koeman de darles más minutos en detrimento del argentino, que podría vivir una ultima aventura en Barcelona siendo el conejillo de indias de su presidente.