Messi ya choca con Koeman y el Barça por el fichaje: “Es fundamental”
El FC Barcelona sondea su incorporación
Por el bien de Leo Messi, el Barça, Ronald Koeman e incluso Josep Maria Bartomeu el Barcelona ha de empezar el curso con buen pie, con paso firme y sin dudas, asentando el nuevo proyecto y disipando fantasmas. Eso sería lo ideal, pero el ecosistema actual del Barça está lejos de ser perfecto. La estrella, Messi, se ha quedado a disgusto en el club y de alguna manera se lo hará pagar al presidente, mientras que Koeman debe aguantar ahora unos galones más grandes que los suyos, que de hecho ya le exigen jugadores.
Más bien, como aseguran ciertas fuentes en la Ciudad Condal, son sugerencias, pero viniendo de quien vienen hay que escucharlas. Y es que Messi, que ya tiene que aguantar sí o sí esta temporada en Can Barça, le ha hecho una vieja petición al Barça a raíz de que han salido ciertos nombres de jugadores holandeses como futuribles para la entidad blaugrana. Pues bien, a Leo, más que esos nombres le gusta otro futbolista con ADN Barça, que está a tiro y al que el Barça puede acceder.
Lo que pasa es que este jugador no es tanto del agrado de Ronald Koeman, que prefiere a Giorgino Wijnaldum y Memphis Depay antes que al pretendido por Messi: Thiago Alcántara. Las dudas del Bayern de Múnich por retener al jugador español, el cual buscaba una salida del club bávaro, y las del Liverpool a desembolsar los 25 millones que pide el club alemán por él, sitúan al club culé en una buena situación para fichar al mediocentro titular de la Selección española.
Ahora bien, Thiago, más allá del dinero, solo volvería al Barça con la seguridad de obtener todos los poderes en el centro del campo, algo que no está dispuesto a darle Koeman, que además prefiere cierta contención en lo táctico a tanto control de pelota. Para el míster neerlandés es fundamental apaciguar la sangría de goles encajados y paliar el desorden en las transiciones defensivas y Thiago no llenaría esas dos parcelas por lo que, aunque guste al club, no es una prioridad. Y Messi discrepa…