Odegaard fuera y ahora el señalado es Fede Valverde: de mal en peor
El rendimiento y las lesiones del uruguayo, así como los posibles fichajes le quitan espacio en el Real Madrid
El actual Real Madrid, el de Zinedine Zidane, sabe que muchos de los éxitos de esta temporada dependen de que el triunvirato de la medular; es decir los Casemiro, Toni Kroos y Luka Modric, conserve su buena salud de aquí hasta final de temporada. Con ellos el Madrid es más equilibrado, sabe a lo que juega y tiene un control de los partidos mucho mayor. Y obsérvese una cosa de entre todo ello: Fede Valverde ni es uno de estos tres ni es un imprescindible, una situación que podría empeorar de ahora en adelante.
Para Zidane el charrúa es intocable, pero no porque vaya a ser un eje sobre el que pivoten el resto de jugadores titulares, sino porque es un cambio fundamental en la rotación. Las lesiones y su rendimiento esta temporada no han permitido al joven jugador sudamericano dar un salto más en su desarrollo, uno que se esperaba en Chamartín, de modo que tendrá que seguir esperando su hueco pese a que la salida de Martin Odegaard y el pobre estado de Isco Alarcón le otorgan el primer puesto en la medular de las piezas que esperan desde el banquillo.
Ahora bien, si el gran estado de forma del triunvirato se mantiene, Valverde no pasará de una segunda fila, que además puede ver supeditada su participación al esquema que plantee Zizou en ellos, ya que los Lucas Vázquez, Marco Asensio, Rodrygo Goes o Vinícius Júnior podrían ocupar, desde la banda, uno de los cuatro puestos del centro del campo (en un teórico 4-4-2 en defensa). Y por si esto fuera poco, la temporada 21/22 arranca con la incertidumbre reciente de Paul Pogba o en su defecto la llegada de Eduardo Camavinga.
El panorama en la 21/22 es el siguiente: tres fijos en el centro más un fichaje para la medular complican la vida a un Valverde que además de estos cuatro jugadores tendrá que pelear con Martin Odegaard, el cual estará de vuelta. Asimismo cabe suponer algún fichaje de ataque que haga las veces de los cuatro jugadores de banda antes mencionados: o sea, más competencia para el pajarito. Dicho de otra forma, Valverde debe aprovechar estos cuatro meses que le quedan a la competición para convencer o su futuro de blanco estará muy en el aire.