Oficial: Kevin Durant presenta al nuevo 7 del Barça
Coutinho, cabreadísimo con el club, ha dado su ok en en público al jugador
El viernes fue intenso en Can Barça. A media tarde la cuenta oficial del Fútbol Club Barcelona hacía público, mediante un vídeo protagonizado por la estrella de la NBA, Kevin Durant, quien sería el nuevo 7 del Barça para la 2020/2021. Lo cierto es que la noticia se ha acogido en la ciudad con algo de sorpresa porque las últimas informaciones hacían pensar que el actual 7 del conjunto blaugrana, Philippe Coutinho, tenía serias posibilidades de quedarse este año en el conjunto culé.
Es por ello que haber visto como la camiseta que Kevin Durant sostiene en el video no lleva el nombre de Coutinho ha roto todos los esquemas de muchos aficionados barcelonistas. Y es que, el también 7 de los Brooklyn Nets, desvelaba el secreto a los pocos segundos en el video en cuestión y mostraba como Antoine Griezmann será el nuevo 7 del equipo azulgrana para la 2020/2021 que está a punto de comenzar.
El campeón del mundo francés ha llevado ese número desde que lo cogiese por primera vez en la Real Sociedad, cargando con él desde entonces tanto en el club txurri urdin como en el Atlético de Madrid, con mucho éxito en ambos casos. Ha sido en Barcelona, durante este primer año en el que portó el 17, cuando ha tenido un juego y unos números tan discretos. Para muchos, poco tiene que ver el dígito que se lleve en la espalda con el juego que haga un jugador, pero para otros, es una bendición que Grizi vuelva a su número mágico. Ahora el principito se viste de príncipe y así será todo más fácil. Al menos eso creen los más supersticiosos.
Pero, entonces, ¿qué ocurre con Coutinho? El internacional brasileño ha dado el ok a la cesión en sus redes aunque, por otra parte, no tenía otra salida. Ahora bien, la profesión va por dentro y el jugador está muy cabreado con el club por haberle puesto en esta tesitura. Una vez más, Coutinho cree que no está recibiendo el apoyo total del club en un momento crítico para su futuro y, según lo ve tanto él como su entorno, no es la primera vez que esto ocurre. Por el momento, el fichaje más caro de la historia del Barça seguirá luchando por hacerse con un hueco en el proyecto de Koeman aunque ya no será con el 7.