¡Otra bomba en el Barça! Messi obligado a salir del equipo
Las nuevas medidas hacen imposibles contratos como el que tiene el argentino
LaLiga, con Javier Tebas al frente, ha anunciado un nuevo recorte salarial para todos los equipos del fútbol profesional, es decir La Liga Santander y La Liga Smart Bank, y vuelve a poner la puntilla a los tres equipos con mayor presupuesto de los campeonatos, además se ceba especialmente en la delicadísima situación económica del Barça. El equipo blaugrana tuvo en la pasada temporada un límite salarial de 671 millones de euros, con la última actualización ha pasado a 347 kilos para pagar salarios a los jugadores, prácticamente la mitad. Y, claro, esta reducción implica que el Barça no va a poder retener a Leo Messi, ya que no va a poder hacerle una oferta de renovación con una cuantía acorde a la dimensión del astro argentino.
La Pulga supone un coste de 100 millones al año para el club, pero, sin pandemia, originaba en ingresos más del doble de su salario. Por eso era viable mantenerle este salario. Desde el club culé están indignados, porque esta decisión de LaLiga les deja sin armas para poder rebatir lo que le pueda ofrecer el Manchester City o el Paris Saint-Germain. De hecho, Leo Messi es más que consciente de la situación y, si continúa en el Barça, sabe que tendría que rebajar sus ingresos, pero esto, unido a la presión fiscal y tributaria, y teniendo en cuenta que el valor de la plantilla también bajará, va a suponer el último empujón para que el fútbol español pierda otra estrella.
Desde LaLiga lo que indican es que estos límites son necesarios para asegurar la viabilidad de los clubes y los equipos son consciente de ello, pero creen que una situación excepcional, como es la que vivimos por culpa del coronavirus, deberían requerir medidas extraordinarias y no dar hachazos a los límites de cada equipo. Cuatro son los equipos que exceden la raya que marca Tebas: Barça, Real Madrid, Atlético de Madrid y Betis. Están obligados a regularizar la situación en los próximos meses, lo que se traducirá en ventas de jugadores y muy pocas incorporaciones, es decir que no solo perderemos a Leo Messi, sino que será imposible traer a Mbappé o a Haaland.