Primera víctima del vestuario por el Barçagate: Koeman no lo retendrá

A veces hace falta dar muchas vueltas para terminar triunfando en un lugar al que se podía haber accedido directamente, pero el fútbol no es una ciencia a la que se le puedan aplicar cálculos, ni mucho menos una disciplina exacta o previsible; por lo que el jugador del FC Barcelona Jean-Clair Todibo no quiere ni siquiera oír hablar de su club propietario, al que, de hecho, no quiere regresar. Ahora es feliz en la Ligue 1 y da portazo a la opción de regresar al Barça y LaLiga, esté Laporta, Koeman o Messi en el club catalán.

Y es porque le ha costado destacar al central, ya que su paso por el Benfica fue todo un rosario de lesiones y banquillos. Ahora bien, ha sido llegar a Niza y encontrar su sitio, uno que ya se ha ganado en los onces del cuadro francés, donde, como decimos, es feliz. Y esa es la perspectiva de un jugador que aún sigue perteneciendo al club blaugrana. Por el contrario, la del Barça, más aún con los problemas que ha tenido en defensa este año, pasaban por recuperarle para la causa.

Pero esta historia, si sigue el ritmo de los acontecimientos normales, va a dar de bruces con la realidad: el jugador se desvinculará del Barcelona y el club francés se hará con su plena propiedad. No en vano, el futbolista le ha comunicado a su actual entidad que no desea volver a la ciudad condal y el club francés, que está muy contento con él, posee una opción de compra de 8,5 millones de euros; una que seguramente ejercerá.

En todo ello y como telón de fondo, sorprende y es revelador el poco interés que el jugador de 21 años, nacido en Cayenne, en la Guayana Francesa (de nacionalidad gala), tiene en su todavía club propietario y la liga española, ya que, al ser preguntado por el maremágnum de esta temporada blaugrana, con el Barçagate arruinando el prestigio del club por medio, el futbolista fue rotundo: “No voy a mentirte, no estoy muy interesado en lo que está pasando”, dijo a los medios. Tal vez el pensamiento de Todibo sea el primero de muchos dentro de un vestuario, el culé, que hace aguas. Sobre ello, Messi es la cúspide de la pirámide y su adiós, como el de Todibo, cada vez parece más seguro.