Problemón para Florentino: Courtois impulsa un adiós casi inevitable
La presencia del belga en el club podría provocar la salida de otra pieza merengue
Resulta prácticamente innegable a fecha de hoy que Thibaut Courtois es el mejor portero del mundo. Sus prestaciones desde que llegó al Real Madrid en el año 2018 están siendo sobresalientes y mucha incidencia ha tenido el belga en la cadena de éxitos cosechados por el club durante este lapso de tiempo, con especial énfasis en la última Champions League conseguida.
Eso sí, no todo es felicidad en este apartado ya que, si Carlo Ancelotti ha encontrado una pieza de oro para cubrir la portería gracias a Courtois, Florentino Pérez se ha topado con un problemón que viene gestándose desde hace bastante tiempo atrás: la idea de Andriy Lunin de poner tierra de por medio con la casa blanca.
El guardameta ucraniano también ha demostrado atesorar cualidades para ser útil en el proyecto merengue, pero el protagonismo del futbolista está siendo muy residual por esa mencionada presencia de Courtois y solo la Copa del Rey, amén de las lesiones sufrida por el belga, le han permitido gozar de minutos en el Real Madrid.
De ahí que la salida de Lunin, tal y como hemos podido saber en Don Balón, se prevea oficial el próximo verano, pero esta vez de forma definitiva. El ucraniano, desde que se vinculó con el conjunto merengue en 2018, ha salido cedido hasta en tres ocasiones, siendo Leganés, Valladolid y Oviedo sus destinos, pero esta vez la intención del ucraniano no puede ser más firme.
Lunin también es consciente de que, a pesar de su poco protagonismo en los últimos años, atesora varios pretendientes entre las ligas de mayor renombre en Europa que estarían dispuestos a reforzar sus plantillas con su fichaje y así obligará a Florentino a lidiar con este problema el próximo verano, un problema que mira a encontrar un suplente de garantías para Thibaut Courtois para los próximos cursos.
En este sentido, Daniel Ospina y Fernando Pacheco fueron las dos alternativas que han sonado anteriormente para ostentar ese rol secundario en la meta blanca, pero estas dos opciones ya han desaparecido de la agenda blanca tras comprometerse recientemente con nuevos clubs y ahora la directiva merengue tiene seis meses por delante para encontrar un recambio para Lunin, quien, si nada se tuerce, dirá adiós al Bernabéu en el mercado estival.