Quería mejorar a Raphinha y a Dembélé en el Barça, abandonó a Xavi y su fracaso da la razón al culé
El marroquí ha acabado postrado en el banquillo y lejos del Barcelona
En el pasado mercado de verano, en las oficinas del Camp Nou se tomó una decisión que generó una importante polémica. Y es que, con la venta de Ousmane Dembélé, en el Barça buscaban opciones de cara a suplir al francés en la posición de extremo, demarcación donde Raphinha partía como favorito, pero para la cual también se contaba, a priori, con Abde, el cual acabó dejando el equipo antes del cierre de mercado con la intención de ser importante en otro equipo.
Con la decisión ya tomada, el extremo nacido marroquí acabó cerrando su fichaje con el Betis en una operación que no gustó nada en el Barcelona, pues solamente dejó 7,5 millones de euros en las arcas del club, que hubiera esperado sacar una mejor venta por un jugador que había despertado cierto interés en la Premier League.
De candidato en el Barça, a olvidado en el Betis
La realidad con Abde ha acabado siendo realmente dura. El actual jugador del Betis dejó el Barça con la intención de ser una pieza clave en Sevilla, donde nada de lo que esperaba el marroquí ha acabado por suceder. Tan es así que se ha acabado convirtiendo en un habitual del banquillo de donde Pellegrini apenas lo saca. Y es que, en liga, Abde apenas ha logrado jugar más de 700 minutos, en los cuales solamente ha aportado un gol y no ha dado ninguna asistencia. Unas cifras realmente pobres que acreditan el fracaso del marroquí en el Benito Villamarín.
Con contrato hasta 2028, a Abde todavía le queda mucho tiempo para demostrar que tomó la decisión correcta al dejar el Barça, donde, pese a que Xavi no le podía garantizar ser un titular habitual, sí que hubiera contado con un nivel de oportunidades similar a las que está teniendo ahora en el Betis. Además de no tener la presión de rendir como la tiene en el Betis, donde le pesan bastante esos 7,5 millones que costó su traspaso.
Así pues, la decisión de Abde de dejar el Barça por el hecho de no ser titular por delante de Raphinha ante la marcha de Ousmane Dembélé ha acabado dejando claro que Xavi tenía razón, pues apenas está contando en el Real Betis.