Ronald Koeman da el OK: el nuevo favorito para la zaga del Barça
Siguen saliendo nombres propios
El Barça sigue empeñado en reforzar su lateral derecho, una posición en la que solo quedará Sergi Roberto, tras la venta de Nelson Semedo al Wolverhampton Wanderers y la cesión de Moussa Wagué al PAOK de Salónica. Y Ronald Koeman, si bien ha demostrado su confianza en el internacional español en esta pretemporada, sabe que no puede apostar todo por un jugador que no deja de ser un centrocampista reconvertido, y que tiene serias carencias.
Hace falta traer a un especialista, y no dejan de salir nuevos nombres, siendo vinculados con insistencia Sergiño Dest, Emerson Royal… aunque, ahora, ha aparecido una nueva opción. Y esa se trata de la que tiene a Héctor Bellerín como favorito, una posibilidad que parecía haber quedado en el olvido, si bien sonó con fuerza hace unas cuantas semanas. Pero Josep María Bartomeu la ha vuelto a rescatar, después de que se frustrara su traspaso al Paris Saint-Germain.
El internacional español sonó con fuera para aterrizar en la Ligue 1, algo que finalmente no se dio, por un motivo o por otro. Y al conjunto dirigido por Thomas Tuchel no le ha quedado otra que apostar por Alessandro Florenzi, al que han traído a préstamo desde la AS Roma, si bien pasó los últimos meses de la temporada en las filas del Valencia. Volviendo al de Badalona, de nuevo ha recuperado la sonrisa y la felicidad con Mikel Arteta.
Ha vuelto a ser titular, y ha ofrecido un muy buen rendimiento, dejando atrás el problema con las lesiones de rodilla que tuvo. Algo que le ha servido para llamar otra vez la atención del Barça, que pretende traer de vuelta al que en su día fue una de las grandes promesas de La Masía. Y estarían preparando una oferta importante, cifrada en unos 35 millones de euros, si bien tampoco se descarta una cesión con opción a compra en el próximo verano.
Eso si, parece complicado que el Arsenal acepte dejar salir a Bellerín, que es indiscutible, y con la Premier League ya arrancada. Tendrán que ofrecer mucho más.
No es, por lo tanto, una vía sencilla en absoluto.