Ronald Koeman y Zinedine Zidane tiran la caña, es el caso Odegaard 2.0

Es uno de los jugadores que está llamado a dominar en Europa a la altura de los mejores

Ronald Koeman y Zinedine Zidane tiran la caña, es el caso Odegaard 2.0

Con solamente 20 años ya ha despertado el interés de los mayores colosos continentales. Dominik Szoboszlai es la gran joya de la cantera del Salzburgo, una joya que está dejando unas credenciales espectaculares en la presente edición de la Champions League.

Tal alto está siendo su rendimiento que tanto Zidane como Koeman le han anotado en la agenda como una alternativa de futuro: un caso Odegaard 2.0. Como ya ocurriera en su momento con el talento noruego, aparte de los dos mejores equipos españoles, muchos otros de las destacadas ligas europeas están al acecho del joven húngaro, que está firmando una excelente actuación esta temporada tanto en la competición doméstica como en la máxima europea. En los trece partidos oficiales que ha disputado hasta la fecha, el jugador ha anotado cinco goles y ha repartido otras cinco asistencias, lo que le ha convertido en una de las revelaciones de la temporada y en uno de los mayores talentos a seguir.

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Todo hace indicar que al finalizar el presente curso buscará un reto de mayor envergadura en su carrera para tratar de reafirmarse como uno de las mejores promesas del fútbol europeo de la última década, y de sobra tiene condiciones para ello. Su gran golpeo de balón es su principal baza, pero también es un jugador tremendamente rápido y, a pesar de que su alta estatura hace pensar lo contrario, es un jugador muy hábil con el balón en los pies y es capaz de desbordar rivales en un palmo de terreno.

Junto a Jadon Sancho, Phil Foden y Ferrán Torres, entre otros muchos talentos, forma parte de esa hornada de jugadores nacidos en el año 2000 que se disputarán los mejores trofeos individuales cuando Messi y Cristiano Ronaldo decidan echarse a un lado.

Szoboszlai no solamente se ha convertido en la referencia de su equipo, además se ha erigido como el absoluto caudillo de la selección húngara -a pesar de su juventud-, lo que dice mucho de su capacidad de liderazgo. Aunque la temporada ha comenzado hace poco más de dos meses, el jugador ya está siendo minuciosamente tanteado por los mejores equipos, que tratarán de pescarle de cara a sus aspiraciones de futuro y, de paso, dar paso un relevo generacional que muchos están pidiendo a gritos.