Sale a la luz el delantero que rechazó irse a Madrid. ¡Otra vergüenza más!

Siempre que van pasando las fechas van saliendo informaciones sobre fichajes que no se dieron y los porqués. En el Madrid se ha sabido de la negativa de Zidane de firmar a Bruno Fernandes durante el mercado de verano. El francés quería a Pogba. Y de momento ha salido perdiendo. Quien ha hablado también es el ídolo del propio Zidane, Francescoli. El Atlético de Madrid intentó firmar a Santos Borré en las últimas horas del mercado. El director deportivo uruguayo ha explotado.

Y es que el colombiano ya perteneció al club atlético hace varias temporadas. No terminó de explotar y decidieron venderle al River. En Argentina el delantero se ha convertido en un ídolo. Tiene gol, es explosivo y muy trabajador. Es uno de los ídolos de la afición y ha despertado el interés de muchos equipos europeos.

Entre ellos se encontraba el Celta de Vigo este mismo invierno. El club vigués tanteó su incorporación, pero el porcentaje que tenía el Atlético aún del jugador, algunos hablan hasta de un 35 por ciento, complicó la negociación con el equipo de Buenos Aires. Finamente el club vigués acabó firmando a Smolov. El ruso ya se estrenó marcando en el Santiago Bernabéu.

El Atlético ante la imposibilidad de firmar a Edison Cavani por su alto coste, fue a por Borré. Era un fichaje barato, tenían partes de los derechos, y ya era un jugador que conocía el club, la ciudad y al Cholo. Para la secretaría técnica era un win to win.

El River Plate sabía que no podía rechazar la oferta, económicamente era para ellos una necesidad decir que sí, así que todo quedó en manos del jugador. El colombiano dijo que no y el Atlético acabó firmando a otro ex, Carrasco.

Francescoli ha estallado hoy por las malas formas que el club colchonero intentó su fichaje. “Con la temporada acá recién empezada y sin darnos opción a fichar a nadie más. No he vuelto a hablar con Cerezo desde entonces ni creo que lo haga. La relación con ellos está rota”.

Mal asunto para el Atlético de Madrid cerrarse las puertas con un club como el River. A veces es mejor ir de cara que por detrás. Cerezo debería saberlo mejor que nadie.