Se harta de esperar a Florentino Pérez y encuentra nuevo club
Ha tenido demasiada paciencia con el Real Madrid
Massimiliano Allegri lleva cerca de un año y medio sin dirigir a ningún club. Porque abandonó la Juventus de Turín, de manera sorprendente, en verano de 2019, a pesar de los buenos resultados que obtuvo en el lustro que estuvo allí. Consiguió todos los ‘Scudettos’ posibles, cuatro Coppas de Italia, dos Supercopas de Italia, alcanzó dos veces la final de la Champions League… y tenía una muy buena relación con los pesos pesados del vestuario, excepto con Leonardo Bonucci y Paulo Dybala.
Pero la eliminación de la Copa de Europa en cuartos de final, a manos del Ajax de Ámsterdam, provocó que la directiva decidiera prescindir de él. Y su sucesor fue Maurizio Sarri, que empeoró los resultados que obtuvo, y que ya ha sido despedido, para apostar por Andrea Pirlo. Ahora, el que también fuera técnico de la US Sassuolo, con el que ascendió a la Serie B, y del AC Milan, con el que ganó una Serie A y una supercopa, ya habría encontrado nuevo refugio.
Porque la Lazio está tratando de renovar, sin éxito, a Simone Inzaghi. El ex futbolista profesional ha llevado a los capitalinos de vuelta a la máxima competición continental, después de más de una década de ausencia, y tras quedar cuarto en liga. Su gran trabajo aún no ha sido premiado, y su vínculo expira en 2021, es decir, que finaliza al término de la presente campaña. El problema es que ha recibido varias llamadas del extranjero, y le pagan mucho más.
Motivo por el que está cerca de irse. Y en el Estadio Olímpico estarían en conversaciones avanzadas con Allegri, que esperaría lo necesario para ponerse a las órdenes del equipo. Hay que recordar que sonó tanto para el Barça como para el Real Madrid, especialmente, para este último. Pero Florentino Pérez nunca ha acabado de apostar por él, por ejemplo, tras la dimisión de Zinedine Zidane, cuando en su lugar, se decantó por Julen Lopetegui.
Mucho ha llovido desde entonces, y demasiado ha tenido que esperar. Ya tiene decidido que no lo hará más. Es el turno de ir a otro lado.
Concretamente, a Roma.