Se la tenían jurada a Florentino y ahora se la pueden cobrar con Ramos

El capitán lo había descartado pero en los últimos días ha vuelto a planteárselo

Se la tenían jurada a Florentino y ahora se la pueden cobrar con Ramos

En el verano de 2018 Florentino Pérez se ganó un adversario más a su lista con el fichaje, in extremis, de un Julen Lopetegui que estaba a punto de dirigir a la selección española en el Mundial de Rusia. La Roja se había clasificado de forma exquisita a la cita mundialista y todo se fue al traste justo antes de comenzar. Tras aquella operación, Luis Rubiales, el entonces ya presidente de la Real Federación Española de Fútbol, apuntó el nombre de Florentino Pérez y se prometió devolver el golpe.

Florentino Pérez y Sergio Ramos

Han pasado casi tres años desde entonces y la venganza parece estar cada vez más cerca. El futbolista y capitán del Real Madrid, Sergio Ramos, está inmerso en un periodo de negociación con el club blanco para poder renovar un contrato que, si nada ni nadie lo remedia, finaliza el próximo mes de junio. El club ha dado un plazo al sevillano que ha ido posponiendo ante la falta de respuesta de Ramos, pero ya le ha comunicado que el próximo domingo 4 de abril será el último en el que el camero podrá aceptar la actual oferta: dos años manteniendo su sueldo el primero de ellos y rebajándose un 10% durante el segundo.

Por su parte, Ramos, que no tiene ofertas interesantes de ningún otro club, había dado vueltas en su día a la opción de participar en los Juegos Olímpicos de Tokio. Esa experiencia era y es algo que le haría ilusión vivir antes de su retirada, ya que nunca antes el andaluz ha participado en unos y el tiempo se le va agotando a sus ya 34 años. Con esta situación ha sido el propio Rubiales quien ha tomado la delantera recordando a Ramos que la opción de participar en los próximos JJOO, a celebrar el próximo verano, sigue muy abierta para él.

Si Ramos acepta esto, el Real Madrid daría por cerrada cualquier opción de renovación, pues a la Eurocopa habría que sumarle unos juegos que tendrán lugar a finales de julio y comienzos de agosto, o lo que es lo mismo, en plena pretemporada blanca. Tres años después Rubiales podría cobrarse una venganza que lleva deseando desde entonces para con Florentino Pérez.