Se pelea con Diego Pablo Simeone y llama a Laporta para ir al Barça

La carrera de Saúl Ñíguez ha sufrido un tremendo estancamiento, y eso que prometía muchísimo. Porque todos se acuerdan de cuando irrumpió en el primer equipo del Atlético de Madrid, después de superar una cesión al Rayo Vallecano. No en vano, llegó a ser el jugador español con más valor de mercado, y será difícil de olvidar ese golazo que le marcó al Bayern de Múnich, nada más y nada menos que en una semifinal de la Champions League. O también esa chilena al Real Madrid.

Era una de las grandes estrellas del conjunto de Diego Pablo Simeone, y tuvo miles de ofertas para cambiar de aires. Sobretodo, desde la Premier League, pues el Manchester United se obsesionó con él, e incluso estaba dispuesto a pagar su cláusula, de unos 100 millones de euros. Pero siempre juró lealtad al club de su vida, y que se lo ha dado todo. El problema es que, a nivel personal, en los últimos cursos ha estado muy por debajo de lo esperado.

Le ha perjudicado mucho el hecho de ser utilizado en tantas posiciones, pues ha actuado como pivote defensivo, mediocentro, interior, lateral… y ha acabado siendo bueno en casi todo, pero el mejor en nada. Basta ver sus estadísticas esta temporada, para darse cuenta de que ya no es importante para el técnico argentino. De hecho, ha sido suplente en prácticamente todos los partidos, y apenas ha contribuido en conquistar La Liga Santander.

Por eso Luis Enrique no se lo ha llevado a la Eurocopa, y hace mucho tiempo que no viaja con la selección española. Lo mejor para Saúl, sin ninguna duda, es abandonar el Wanda Metropolitano, algo que se arrepiente no haber hecho antes. Y poco ha tardado en ponerse en contacto con el Barça, que, en el pasado, también estuvo interesado en su fichaje. Joan Laporta ha recibido su llamada, y la de su representante. Pero no hace falta decir cual ha sido la respuesta.

En el Camp Nou ni se plantean pagar lo que costaría sacarle del Atleti, y creen que su puesto está más que cubierto.

Descartado queda.